Otra pelea y los Magic acaban con la racha de los Wolves

ORLANDO MAGIC 108-MINNESOTA TIMBERWOLVES 102

Después de la enorme polvareda que generó el Clippers-Rockets en el día de Marin Luther King, siguen los jaleos: en el segundo cuarto, Afflalo y Bjelica fueron expulsados del Magic-Wolves después de una pelea iniciada por el veterano escolta, que perdió los papeles en la pelea por un rebote y lanzó un puñetazo tremendo a la cabeza del serbio, que generalmente la tiene muy bien amueblada y que, por lo parecía en las imágenes, hizo más por pacificar que por incendiar el asunto: “Intentaba protegerme y gracias a Dios que fue así. Quería tranquilizarle, no sé qué podría haber pasado si mi actitud hubiera sido la contraria…”.

Fue la imagen más sonada de un partido de resultado sonado: después de cinco victorias seguidas por una media de casi 19 puntos, los Timberwolves se estrellaron (108-102) en Orlando, ante unos Magic que no habían ganado en 2018 y acumulaban siete derrotas seguidas y solo una desde el 6 de diciembre (y había sido ante los Hawks y tras prórroga). Jimmy Butler (28 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias, 5 robos), consideró el partido un toque de atención: “Hay que tener humildad, me alegro de la derrota porque no podemos salir a un partido pensando que somos buenísimos. Todavía no hemos conseguido nada. Ellos jugaron más duro”.

Y así fue: acusados de falta de actitud tras un brillante inicio de temporada, los Magic jugaron con la intensidad que les ha faltado otras muchas noches. Y ganaron porque Fournier jugó su mejor partido de la temporada (32 puntos), DJ Augustin firmó 11 de sus 18 puntos (y 6 asistencias) en un último cuarto que su equipo ganó 35-27 y entre Biyombo y Birch (ex del Olympiacos con mucha G-League encima esta temporada) sumaron 26 rebotes y 9 tapones. El primero anotó además cinco puntos en los instantes finales y los Magic dieron la sorpresa ante unos Wolves que quedan en 29-17 y frenan por ahora el asalto a la tercera plaza de los Spurs.

PORTLAND TRAIL BLAZERS 118-PHOENIX SUNS 111

Después de tres derrotas seguidas y de que las sensaciones no dejen de ir a peor en Portland, la visita de los Suns (16-29) fue balsámica en Oregón, donde las cosas no van como se esperaba en el inicio de la temporada y donde las partes parecen bastante más, ahora mismo, que el todo del equipo. Muy solo, Devin Booker (43 puntos, 8 asistencias) dio otro recital (promedia casi 25 puntos por noche con sus 21 años) pero los Blazers ganaron con mucha comodidad, 31 puntos y 7 asistencias de Lillard, 27 de McCollum y Stotts metiendo y sacando del equipo a un Nurkic cuyo efecto no está siendo el esperado después de su brillante impacto en el tramo final de la pasada temporada. Los Blazers son séptimos ahora en el Oeste (23-21) pero con solo medio partido de ventaja sobre el noveno, los Clippers. Si las lesiones respetan a los Pelicans y los Nuggets se asientan definitivamente, quizá entre esos dos equipos se dirima el último billete para los playoffs.

DENVER NUGGETS 105-DALLAS MAVERICKS 102

Los Nuggets son otro de los equipos inmersos en esa pelea de perros que (parece) será el Oeste entre las plazas sexta y novena. Todavía sin Millsap, Michael Malone le da vueltas al mejor formato de un equipo irregular, y que desde luego tiene que situar a Nikola Jokic como pívot. Barton volvió al quinteto, Plumlee al banquillo y el serbio, jugando como eje en las zonas, terminó con 29 puntos, 18 rebotes y 7 asistencias. Y los Nuggets parecían tener el partido bajo control (82-59 en el minuto 32) pero se vieron en un 103-102 a diez segundos del final, antes de que Gary Harris (25 puntos) congelara con dos tiros libres la furiosa reacción de los Mavericks, liderada por Dennis Smith Jr. Los 25 puntos y 5 asistencias del base y la excelente toma de decisiones de Rick Carlisle casi provocan una remontada apoteósica. Los Mavericks están ahora 15-30 pero compiten prácticamente todas las noches: de sus últimos doce partidos, solo uno se ha decidido por una diferencia de más de diez puntos.