Joel Embiid aún no ha debutado oficialmente con ninguna selección y está, por así decirlo, libre para elegir "nacionalidad deportiva". El jugador de los Sixers es uno de los pívots más dominadores de la NBA: sabe bailar en la zona a pesar de sus 213 centímetros y su lanzamiento a larga y media distancia progresa a pasos agigantados. Todo un tesoro que todavía no se ha estrenado con su país de origen Camerún (antigua colonia francesa). Estuvo cerca, pero una lesión en el pie le impidió estar en el Afrobasket de 2015. Por tanto, las puertas para su debut internacional se mantienen abiertas. "Creo que sería una oportunidad", dijo en Londres sobre la opción de jugar con Francia, el gran rival de España en la última década, a RMC Sport. "Nunca se sabe. Podría ir con la selección francesa, pero también con la camerunesa. Tengo muchos parientes en Francia".

No es la primera vez que al center de los Philadelphia 76ers se le tienta con esta posibilidad. Durante el Mundial de 2014, Embiid animó a través de Twitter a nuestra selección vecina durante un partido contra Croacia. Tras el mismo, Nicola Batum, alero galo de los Charlotte Hornets, respondió a los mensajes, diciéndole que debería formar parte del equipo. "No soy francés", respondió un jugador que durante su juventud estuvo cerca de emigrar al país galo para progresar en el voleibol. Al final, se decidió por el baloncesto y Estados Unidos tras un campus que organiza Luc Mbah a Moute en Camerún.

La conversación Embiid-Batum