¡Qué paliza! Primera victoria de Westbrook contra Kevin Durant

Así sí, pensarán los aficionados de los Thunder. Y no es para menos. Contra los todopoderosos Warriors, 48 minutos de máxima intensidad defensiva y una victoria que vale mucho más que la W que sube al casillero. Se demostraron a sí mismos y a todo el que quiso ver el partido que pueden competir de tú a tú con el mejor equipo del planeta.

Los primeros minutos marcaron el tono del partido, el segundo cuarto fue de Russell Wesbrook y el tercero fue el definitivo do de pecho: hoy no nos vamos a caer. Los Thunder empezaron concentrados y, como casi siempre, consiguieron una ventaja cómoda al final del primer cuarto (+7). Carmelo Anthony anotó cuatro veces seguidas (una de esas rachas...) y Jerami Grant fue clave desde el banquillo con dos tapones espectaculares contra un Durant en pleno vuelo que la grada jaleó como si no hubiera un mañana. El momento se traslado al segundo cuarto, con la defensa siempre como arma principal y los tres grandes haciendo daño en el otro lado: 20 de Westbrook (11+5+5 en el primer cuarto), 16 de Melo y 14 de un Paul George que enseñó su mejor versión, decisiva en los dos lados de la cancha (talento puro en uno y brazos-garra-intensidad-ayudas-desplazamiento en el otro).

Quiero más pick&roll entre los dos aleros de OKC, que sacan ventajas importantes cada vez que se cruzan en ataque. Pero todo forma parte del proceso de aprendizaje, que sigue dando pasos y que se desangra en los finales igualados (sus nueve derrotas han llegado por nueve puntos o menos y sus ocho victorias por nueve puntos o más). Afortunadamente para los de azul, Westbrook se encargó de que no hubiera ninguna opción de remontada con un par de robos que acabaron en mate y 2+1 y acabaron con el miedo al tercer cuarto de los de Oakland: 65-48 al descanso y +6 OKC también en el tercero, ese cuarto que es, por norma, propiedad de los Warriors.

Para Russ, 34 puntos, 10 rebotes, 9 asistencias, cuatro robos de balón (tantos como Paul George, que lidera la liga) y un pequeño pique con Durant que incendió a la grada. Habían cruzado palabras un par de veces (Westbrook defendió bien a KD en los cambios) y al final se encararon. Frente con frente y técnica doble. Durant se reía, pero el que estaba ganándolo todo esta vez era Russ, que se llevó el duelo (por goleada), la victoria moral y también la real: primera vez que los Thunder baten a los Warriors desde que Durant cambió el azul por el blanco y Oklahoma City por Oakland.

El 35 de los Warriors fue abucheado cada vez que tocó el balón y estuvo muy bien defendido (salvo algún lapsus) durante todo el partido. Acabó con 21 puntos, tres menos que Stephen Curry, y los campeones salieron de OKC con un buen repaso a cuestas. 22 de Melo, 20+11+4 de George y 12+14 de Steven Adams en los locales, que anularon a Klay Thompson (tres canastas) y sacaron de quicio a Draymond Green.

La clave de casi todos los partidos suele empezar atrás, y más si hablamos de OKC, un equipo con un potencial defensivo brutal, un animal agazapado que tira de brazos y piernas para tocar, correr y matar: 34 puntos tras pérdida del rival,15 robos totales y sonrisa recuperada. Hoy hemos visto lo que pueden ser de verdad estos Thunder.