Un gran Ricky (21) bate a Lonzo; Mitchell se presenta en la NBA
Los Jazz fueron todo el partido por delante y aprovecharon la vuelta a casa (3-0) para romper una racha de dos derrotas consecutivas.
No hay nada como tu propia casa, que dicen los norteamericanos. Para los Utah Jazz significa tanto o más que para cualquier otro equipo NBA. Tres desplazamientos, tres derrotas. Tres partidos en el renovado Vivint Smart Home Arena y tres victorias. Ninguna como la de ayer, después de dos derrotas consecutivas y con un 2-3 amenazante en la clasificación. ¿La solución? Un gran partido en equipo, como casi siempre que ganan los Jazz. Pero un mejor partido de Ricky Rubio, la cabeza (junto con Joe Ingles) y de Donovan Mitchell, la chispa (el diferente: puede ir un paso más allá).
El base español se fue hasta los 21 puntos, mejor marca una temporada en la que está anotando más que nunca, y anotó cuatro de los siete triples que intentó (cuarta vez en su carrera que suma cuatro veces desde la línea de tres puntos). Añadió siete rebotes y cuatro asistencias para liderar a un quinteto titular que no tardó en dejar a los Lakers atrás.
Solo un jugador anotó más que Ricky en el partido: Donovan Mitchell (22 puntos, mejor marca). El novato, número 13 del último draft (los Jazz subieron puestos para elegir al ex de Louisville), se presentó en la NBA con un partido sensacional. Ya habíamos visto tramos explosivos en algún otro encuentro (anotó 19 contra los Clippers), pero nada como lo de ayer...
La valentía, las ganas, la madurez de un juego en el que los amagos y las fintas tienen un papel fundamental (hablamos de un escolta que no destaca por su altura)... Y apareció la potencia. Un mate tras rebote ofensivo en el que agarró el balón detrás de su cabeza. Explosión.
Al final, 22 puntos, 9/16 en los tiros y 3/6 en triples en su mejor partido NBA. Y lo que nos queda por ver... Cuando el talento se atreve puede pasar cualquier cosa.
En el otro lado, Lonzo Ball metió los triples, que no es poco (3/6 ayer, venía con una racha terrible de tiro), pero estuvo bastante discreto en las demás facetas del juego (9+2+4) y todavía le cuesta horrores ordenar a su equipo y mandar en cinco contra cinco (llegará con el tiempo).
"Creo que he acabado con nueve puntos, cuatro asistencias...algo así. No es suficiente", aseguró tras el partido un Ball muy crítico con su propio juego. El base de los Lakers asumió la responsabilidad de la derrota de su equipo e incluso señaló un par de errores propios en el mate y en un triple de Mitchell. "Apuntadme esta derrota a mí", pidió Lonzo (vía ESPN), mostrando la madurez con la que encaja las cosas con 20 años recién cumplidos.
El mejor en los Lakers fue Brandon Ingram (a los puntos, más máximo anotador que otra cosa), que dejó algún detalle (un drive desde la cabeza que acabó en mate después de dejar atrás a su par con un gran crossover) y acabó con 16 puntos.