En los últimos campeonatos con la Selección, como en sus primeros pasos en la ACB, Gasol ha demostrado su buena muñeca cuando las circunstancias así lo han requerido. No obstante los triples eran un recurso puntual en su juego, no habitual. Algo que ha ido convirtiendo en tendencia desde el regreso de su lesión. En esos 18 encuentros únicamente no lanzó de tres en uno (tira 2,5 por encuentro) y cantó al menos un bingo en 15 de ellos. En total, un 27/45 en triples que le reporta un increíble 60% de acierto. Tan certero que lidera esta clasificación desde el parón por el All Star entre aquellos jugadores que intentan un mínimo de dos por noche.
Una nueva faceta de triplista que le permite castigar a cualquier interior que le flote. Las características del juego de los Spurs, presidido por el constante movimiento de balón en busca del extra pass, hace que el balón le llegue a menudo cuando se encuentra frontalmente mirando al aro desde la línea de tres. Así que si el defensor decide no salir, Pau no se lo piensa y dispara. “No nos hemos sentado con él para decirle que ahora tiene que tirar triples. Francamente, no lo esperábamos. En parte responde a una necesidad de ocupar el espacio cuando Aldridge está en pista junto él. Ha decidido evolucionar de esa manera teniendo éxito. Así que por nosotros que siga así”, comenta Popovich al respecto. Más lacónico se muestra el protagonista: “Simplemente trato de sobrevivir en una Liga que no para de evolucionar”. Reciclarse o morir. Pau Gasol, cuando el talento se pone al servicio de la inteligencia.