Kawhi decide a 2 segundos del final; 18 de Pau desde el banco
Los San Antonio Spurs siempre están ahí. A 3,5 partidos de los Golden State Warriors, en Texas sueñan con el '1' del Oeste.
Los Pacers (31-30, sextos en el Este) cerraban en San Antonio un tramo de calendario terrible. Desde que recibieron a los Thunder en el Bankers Life Fieldhouse el pasado siete de febrero, Paul George y compañía han jugado dos veces contra los Wizards, dos también contra los Cavaliers y otras dos contra los Spurs, además de recibir a Bucks y Grizzlies y de viajar a Houston. Un tramo en el que perdieron siete consecutivos y del que han estado a punto de salir con dos triunfos de enorme importancia, ya que ganaron en el hogar del triple hace un par de noches (HOU) y se quedaron a un fallo de Kawhi o un acierto de su propia estrella de vencer en El Álamo.
Con Pau Gasol como suplente de auténtico lujo y un Kawhi Leonard (31) inspirado (para variar...), los locales escaparon de las garras de los Pacers a dos segundos del final. El partido fue igualadísimo de principio a fin, con Dejounte Murray en el lugar del lesionado Parker (cuádriceps) y el banquillo de los Spurs arreglando las pequeñas desconexiones del quinteto titular. LaMarcus Aldridge se quedó en seis puntos en uno de sus peores partidos, pero un infalible David Lee (18 sin fallo) y un gran Pau Gasol (18+4+2 en 21 minutos) compensaron desde el banco.
Con los Spurs cuatro arriba a dos minutos y medio del final, C.J. Miles (19) lanzó una bomba sobre la bocina de posesión y, desequilibrado, encontró la tabla para reducir la distancia. Después, Myles Turner (16) hizo gala de su dominio del pick&pop para poner a los suyos uno arriba antes de que Kawhi decidiera en uno contra uno ante Paul George a dos segundos del final (pidieron pasos los rivales y parece que mueve los dos pies...). El alero de los Pacers, que no estuvo acertado (5/18 en los tiros, 22 puntos) aún tuvo un buen triple para cerrar el encuentro, pero su lanzamiento chocó contra el hierro.
Lo difícil no es llegar, sino mantenerse. Famosa frase cargada de realidad que cuenta incluso con la excepción que confirma la regla: los San Antonio Spurs. A 3,5 partidos de los todopoderosos Warriors que tendrán que pelear contra los elementos durante las próximas semanas (tienen su peor calendario del año ahora) sin Kevin Durant.