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NBA

'Ferrell manía': el jugador de moda tendrá contrato en Dallas

De estar sin equipo a comerse a Lillard en Portland en una de las actuaciones de la temporada: Yogi firmará nuevo contrato con los Mavs.

'Ferrell manía': el jugador de moda tendrá contrato en Dallas
TOM PENNINGTONAFP

Miami Heat ha ganado nueve partidos seguidos de forma casi milagrosa porque tiene a un excelente entrenador que ha sido campeón de la NBA: Erik Spoelstra. Y en el Oeste, Dallas Mavericks ha enlazado cuatro triunfos consecutivos y está 20-30, a solo dos partidos y medio de playoffs en el Oeste después de haber comenzado la temporada 3-13 por la misma razón: un entrenador capaz de hacer milagros como, en su caso, Rick Carlisle. También campeón, precisamente ante Spoelstra (en las Finales de 2011) y capaz de sacar lo máximo de equipos tan depauperados como estos Mavs que acumulan jugadores sin draftear y parchean constantes bajas por lesión mientras enlazan triunfos y vuelven a ser, un año más, un bloque competitivo.

Carlisle puede haber sido la mejor noticia para Yogi Ferrell, que se ha convertido en el jugador de moda en la NBA, algo insospechado cuando le cortaron los Nets el 8 de diciembre y después de solo diez partidos con la franquicia de Brooklyn. En ellos promedió 5,4 puntos y 1,7 asistencias con un 29% en triples. Ahora ha jugado cuatro con los Mavs y ha promediado 17,8 puntos, 5 asistencias y 3 rebotes con un 52% en triples. Eso le ha valido un contrato por dos temporadas en Texas que será efectivo en cuanto se cumplan, el martes, los diez días del vínculo temporal que había firmado con los de Mark Cuban.

Ferrell culmina así su historia de redención, después de no ser drafteado el pasado verano y para sorpresa de muchos, tras cubrir ciclo universitario en Indiana, donde era (aquí puede estar la clave de que saliera del draft sin equipo) un base bajito (1,83) y con poca potencia físico pero muy buena muñeca. En su último año universitario promedió 17,3 puntos y 5,6 asistencias con casi un 40% en triples.

Los Nets le dieron una oportunidad que se le escurrió entre los dedos y el pasado sábado, hace una semana, los Mavericks le firmaron un contrato de diez días por pura necesidad. A las bajas de Deron Williams y JJ Barea se sumaron las de Devin Harris y un Pierre Jackson que también estaba en contrato temporal. A partir de ahí, Ferrell ha sido titular en cuatro victorias consecutivas de los Mavericks, y no cuatro normales: en las dos primeras su equipo logró su primer triunfo desde 2011 en San Antonio y solo una noche después se impuso por primera vez también desde 2011 a un equipo de LeBron James. Spurs y Cavs, víctimas en back to back de un equipo propulsado por Ferrell, que remató su semana mágica con su exhibición en Portland, el hogar de un Damian Lillard al que pulverizó: 32 puntos y 5 asistencias con un 9/11 en triples. La mayor anotación de un jugador en sus primeros 15 partidos en la NBA desde que Blake Griffin anotó 44 en noviembre de 2010.

¿Ferrellmania? Algo así. El diminuto base de 23 años ha estado en el lugar adecuado y en el momento adecuado y la suerte le ha devuelto la que debía tras la noche del draft 2016. Una suerte que él se ha ganado a pulso y en la que ha intervenido de forma decisiva ese mago llamado Rick Carlisle. Por ahora, eso es seguro, tenemos Yogi para reto. Una excelente noticia.