Embiid (26) y Sergio (8+8+11) brillan en la fiesta de los Sixers
Philadelphia acabó con los Suns a base de triples: 17 (igualando su récord histórico). Récord de rebotes para el Chacho y sensacional Joel Embiid.
Los Sixers lograron su triunfo más holgado de la temporada ante los Suns (120-105) con Sergio Rodríguez como director de orquesta. El Chacho rozó el triple-doble (8+8+11) y se asoció con un sublime Joel Embiid (26 puntos en 20 minutos) para hacer disfrutar con el juego de su equipo a los más de 18.000 espectadores que acudieron al Wells Fargo Center. Tras abrir la temporada con un 0-7, Philadelphia empieza a mostrar síntomas de mejora con tres victorias en sus últimos 6 encuentros. Un pobre 3-10 de balance, sí, pero conviene no pasar por alto que necesitaron 34 partidos el curso anterior para cosechar el mismo número de triunfos que en este curso. Tuvieron que esperar hasta el 30 de diciembre de 2015 para celebrar un tercer triunfo que se ha adelantado 42 días.
Partidazo de Embiid
En el festival de triples de los Sixers (17 que igualan la mejor marca histórica de la franquicia) hubo un protagonista destacado, Joel Embiid. En su noveno partido en la NBA (sigue bajo un plan de descanso y limitación de minutos para evitar una nueva recaída) estableció la mejor marca anotadora (26) de un rookie en lo que llevamos de campaña. Registro que igualó esta misma noche Jonathan Gibson (29 años) en su segundo encuentro con los Mavs. Además, el camerunés contribuyó con 7 rebotes, dos asistencias y dos tapones (uno de ellos espectacular, a Booker) en ¡sólo 20 minutos de juego! Resaltar su formidable actuación del primer cuarto. Los Sixers despegaron en el marcador (una renta que supieron administrar durante toda la noche) gracias a sus 17 tantos en en dicho periodo. Un arma ofensiva capaz de anotar desde fuera y dentro de la zona. Imparable.
Embiid tiene todo para ser una estrella de la NBA: calidad, físico y carácter ganador. No le gustó que este jueves Karl-Anthony Towns pasara por encima suya. Así que qué mejor manera de desquitarse que encargándose de poner el show sobre el parqué en el partido siguiente. "Puede que esa fuera la razón principal de mi salida en el primer cuarto. Ese tipo de cosas me hacen enfadarme. Me gusta competir. Quiero luchar y quiero ganar. Me motivan Simplemente quería dominar", admitió después. Su deseo se cumplió. "Me sentí genial". Recuerden, firmó 26 puntos (con 9/14 en tiros de campo y 3/5 en triples) en apenas 20 minutos. Madera de crack.
Sergio apaga el fuego
Tras barrer a los Pacers en Indianápolis, Phoenix no pudo cerrar con buenas sensaciones su back to back. Eric Bledsoe (27+5+6) lo intentó todo y llegó a dejar a los de Watson a sólo 6 puntos en el marcador (72-66), pero entonces emergió el Chacho. Sergio continúa con sus malos porcentajes (3/10 en el tiro), pero cuando más lo necesitaba su equipo apagó el fuego con dos triples en un parcial de 10-0 (82-66) que él abrió y concluyó con un alley-oop con un Stauskas. Aunque sufrió en algunos momentos en defensa, el ex del Real Madrid contribuyó con 8 rechaces defensivos que suponen su plusmarca reboteadora en la NBA. Además, de quedarse a una sola asistencia de su récord (12). Noche feliz para el canario.
Todos suman
A falta de que Okafor y Embiid vean retirada su limitación en pista y de los regresos de Ben Simmons y Nerlens Noel, los Sixers van cambiando la cara poco a poco. Ante los Suns dominaron en la pintura y dejaron la imagen de equipo más compacto al repartir 33 asistencias en 45 canastas. Y sobre todo, contaron con una fenomenal aportación del banquillo con 61 tantos. Sobresaliendo Nik Stauskas por encima del resto: 21 puntos y un +25 para 'Philly' en los 26 minutos que disputó. Ya lo ven, fiesta completa anoche en Philadelphia.