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ACTUALIDAD DE LA NBA

Greg Oden, uno de los peores números 1 del draft, se retira

El pívot, que se encontraba sin equipo en estos momentos y de vuelta en Ohio State, anunció su adiós definitivo del baloncesto: "Se acabó".

Greg Oden.
STEVE DIPAOLAREUTERS

"Ya me gustaría. Se acabó". Con estas palabras al Indianapolis Star, Greg Oden anunció su adiós definitivo del baloncesto. Su marcha no es ninguna sorpresa. El pívot, uno de los peores números unos en la historia del draft, no juega en la NBA desde el 12 de junio de 2014 cuando disputó 80 segundos en el cuarto partido de las Finales con Miami Heat ante San Antonio Spurs.

Mucho tiempo para un hombre llamado a dominar una NBA en la que nunca tuvo suerte por las lesiones. Su gafe comenzó en septiembre de 2007 cuando un microfractura en la rodilla derecha dejó su temporada de rookie en blanco. En la campaña de 2008-09, disputó 61 partidos y en la siguiente, 21, hasta que tuvo que visitar nuevamente el quirófano por la rodilla izquierda. No volvió a vestirse de corto y ambas articulaciones nunca dejaron que fuera aquel gran jugador que deslumbró en Ohio State. En el curso 2013-14, Pat Riley le reclutó para la última aventura del Big-Three de Miami, pero su sentencia en la Liga norteamericana estaba escrita con sólo 105 partidos disfrutados (82 de ellos en Portland).

Aunque Oden no se dio por vencido y trató de dar una vuelta de tuerca a su carrera deportiva con una aventura de 25 encuentros en los Jiangsu Dragons de China. Su papel fue digno con 13,6 puntos, 12,6 rebotes y dos tapones de media. Pero, sin embargo, el hombre elegido por delante de Durant en el draft fue cortado en febrero de 2016, cuando aún restaban dos partidos para el final de la liga regular.

Ahora, con 28 años, Oden busca la forma de coexistir con la vida. Padre de una niña nacida hace cinco semanas, el ya exjugador ha vuelto a su alma matter, Ohio State, como estudiantes-entrenador y ha dejado atrás las polémicas extradeportivas. "No me arrepiento de nada. Sólo desearía haber hecho las cosas un poco mejor", continúa el número 52 de los Blazers. "Aún estoy intentando conocerme, trabajar en mi graduado y asentarme para el futuro de mi familia”.