En Milwaukee, verano no es sinónimo de aburrimiento
Muchas bajas (Carter-Williams, Ennis...) y caras nuevas (Beasley, Snell, Dellavedova, Teletovic, Terry...) para tratar de impulsar el proyecto.
Hemos tenido un verano movido en Wisconsin. Ha pasado de todo. Cosas buenas, traspasos y otras para olvidar. Empecemos por lo mejor. Sin duda, la renovación de un Giannis Antetokounmpo al que ya hay quienes le sitúan disputando el All Star 2017. No tenemos una bola de cristal, pero sí toca aplaudir a John Hammond y compañía. Se aseguran la continuidad por cuatro temporadas (a partir de la próxima y gastando 100 millones de dólares) de uno de los jugadores más ilusionantes de todo el panorama NBA sin ofrecer un contrato máximo. Jugada maestra. En el capítulo de ampliaciones contractuales también toca añadir las de Miles Plumlee (50 y 4) y Steve Novak.
En el mercado de agentes libres se hicieron con Mirza Teletovic (30 millones y 3 años) y el veteranísimo Jason Terry. Alguien a quien Kidd conoce muy bien. Ambos formaron parte de los Mavericks que en 2011 conquistaron el anillo ante los Heat de un LeBron recién aterrizado en Miami. La baja por lesión de Middleton (no dejaremos de recalcarlo: palo terrible) les obligó a reforzar la posición de alero. Para ello renunciaron a dos bases (Tyler Ennis y carter-Williams), para dar cabida en el roster a Michael Beasley (Rockets) y Tony Snell (Bulls). De esta manera, sin contar a ‘The Greek Freak’, queda como único base puro Mathhew Dellavedova. Lograron su llegada vía sign&trade con los Cavs (38,4 kilos y cuatro años).
En el draft apostaron por Thon Maker en el número diez, elección que sorpendió, y se hicieron con el escolta Malcom Brogdon. Días después, renunciaron a los derechos del también ‘dos’ O.J. Mayo. Poco antes, el número 3 del draft 2008 recibió una suspensión de dos años tras violar el programa anti-drogas de la NBA. No se han aburrido en Milwaukee.
