El adiós de Derrick Rose queda reparado con la vuelta a casa de Wade
Chicago Bulls se deshizo de 'su' número uno del draft (además de Noah y Pau Gasol), pero el retorno a Illinois del escolta acaba con la añoranza.
Estos nuevos Bulls comenzaron a forjarse en febrero. En ese mes, Chicago inició su renovación con el adiós de una de sus piezas más legendarias y longevas, Kirk Hinrich, que fue traspasado a Atlanta por Justin Holiday y una futura segunda ronda del draft. Desde ahí, los cambios se han producido a cuentagotas: Pau Gasol se marchó a San Antonio; Joaquim Noah y Derrick Rose, a Nueva York; y Mike Dunleavy, a Cleveland. Los cuatro, más Butler, conformaban el quinteto tipo del conjunto de Illinois la temporada pasada. La operación de Rose es la única que trae sangre nueva a la franquicia desde los Knicks: Robin López y Jerian Grant. Holiday puso rumbo, en ese mismo movimiento, a la Gran Manzana.
Pero ahí no acabó el mercado. Aaron Brooks, base suplente durante dos campañas, probará suerte en los nuevos Indiana Pacers de Nate McMillan, mientras que E'Twaun Moore hará lo propio con New Orleans Pelicans.
Un revolución en la plantilla que se consuma con 10 caras nuevas, muchas de ellas de primer nivel como son el caso de Rajon Rondo (Sacramento) que ha dado siempre lo mejor de sí en la Conferencia Este, y Dwyane Wade, que abandonó su querida Miami, donde lo fue todo, para dar sus últimos coletazos como profesional (tiene 34 años) en la ciudad que le vio nacer y crecer. También, aterrizan jugadores de complemento como Isaiah Canaan (Sixers) y Denzel Valentine, un rookie (primera ronda, pick 14) del que se esperan grandes cosas. A las puertas de comenzar el campeonato, Michael Carter-Williams llegó a la Ciudad del Viento en un traspaso que mandó a Tony Snell a Milwaukee.