"Barkley no se entrenaba: comía McDonald's y nos insultaba"
Su excompañero Jayson Williams desvela ahora que en los dos años que compartió vestuario con el 'Gordo Barkley', este se entrenó unas tres veces con el equipo.
Cuando Jayson Williams (un interior que llegó a ser all star en 1998 antes de cumplir, tiempo después, una pena de prisión de 18 meses) aterrizó en la NBA en 1990, tuvo la suerte o la desgracia de compartir vestuario con él que ya por entonces empezaba a hacerse un hueco entre los mejores jugadores de la Liga: Charles Barkley. Ambos defendieron la camiseta de los Sixers en las temporadas 1990-91 y 1991-92, momento en el que sus caminos se separaron al ser traspasados (Williams a los Nets y Barkley a los Suns). Sin embargo, el compartir todo ese tiempo con uno de los jugadores más controvertidos de siempre da para almacenar una buena cantidad de recuerdos. Algunos estrambóticos, como el que esta semana ha sacado a la luz Williams en el podcast Cookies de 'VICE Sports'. Una anécdota que nos da una nueva pista sobre porqué recordamos a este miembro del Dream Team con el apodo del 'Gordo' Barkley:
"Charles Barkley fue probablemente el hombre más fuerte de cintura para abajo. Aunque eso sí, uno sabía que nunca iba a ganar un anillo. Para un rookie, era la peor persona con la que poder jugar por sus numerosos malos hábitos. Te podías pasar toda la noche por ahí fuera, pero luego no entendías por qué no salías en los partidos. Todo se debía a que cuando Charles venía al entrenamiento él no entrenaba.
Nunca olvidaré esta historia. Era mi segundo día de entrenamiento y estábamos calentando. Charles Barkley llegó unos cinco mimutos tarde. Lo hizo junto a una bolsa grande del McDonald's. Cogió y se sentó en una bicicleta estática. Se pone a pedalear dándonos la espalda. Yo me pregunto: '¿Qué diablos está haciendo? Entonces va y coge los huevos, la salchicha, el sirope de arce, la mantequilla y los pancakes para acabar mezclandólo todo, además de echarse sirope extra. La mantequilla empieza a desbordarse mientras me da por pensar que se va a comer todo eso y ponerse a correr con nosotros. ¡Por supuesto que no! Se lo va a comer mientras se queda en la bicleta estática. Pedalea alrededor de una milla y se pasa la siguiente hora gritándonos mientras el pancake le aosma por la boca: '¡Vosotros, hijos de p...! ¡Poneos a correr, vagos cabro...! ¡Cabrona...! ¡Eso es por lo que nunca vamos a ganar un partido!"
Además de compartir semejante anécdota, Jaylen también contó que en esos dos cursos, Bakley se entrenó como unas tres veces con el resto del equipo. Una historia que el propio 'perjudicado' ha confirmado en la 'ESPN': "Es cierto". El problema de que este hall of famer y ahora lenguaraz comentarista y analista lo haya admitido es que quizá pierdan valor sus críticas a los jugadores de hoy en día. Aunque conociéndole, seguro que esto última le importa bien poco al 'Gordo Barkley'.