El dueño de los Wolves descarta el traspaso de Ricky Rubio
Asegura, eso sí, que con la llegada de Thibodeau seguirán haciendo todo lo posible para que el base español mejore su tiro exterior.
Parece que Ricky Rubio podrá vivir tranquilo durante las próximas semanas ya que por ahora sale del bucle de constantes rumores de traspaso en el que ha vivido especialmente en el último año, con puntos álgido en el cierre del último mercado invernal y antes del pasado draft.
El dueño de Minnesota Timberwolves, Glen Taylor, ha asegurado que en el inicio de la ‘era Thibodeau’ no se cuenta con la salida a corto plazo del base español: “Ahora mismo traspasar a Ricky no es una posibilidad. Creo que al nuevo entrenador le gusta Ricky, a todos en la franquicia en realidad nos gusta Ricky. Queremos que siga con nosotros y que mejore su tiro. Pero más allá de eso defiende, asiste, hace mejores a los demás… tiene cualidades maravillosas”.
Pero insiste, una vez más, en el gran caballo de batalla que ha impedido a Ricky acercarse a la elite de bases de la NBA, el tiro exterior: “Creo que el nuevo ténico quiere traer un entrenador de tiro para ayudar a Ricky. A partir de ahí avanzaremos y veremos cómo de bueno es Kris Dunn”.
Sorprenden estas palabras porque Ricky ya ha tenido un entrenador de tiro en los últimos años: Mike Penberthy. Esos problemas para anotar desde el exterior incluso cuando está completamente solo, y también las dificultades para finalizar cerca del aro cuando penetra (no para asistir, su gran virtud) han sido la eterna cuestión con Ricky, que lleva en la NBA ya cinco años (número 5 del draft de 2009, dio el salto en 2011) y en la que también ha tenido problemas importantes de lesiones. Ahora, con 25 años, afronta una temporada crucial en un equipo que se renueva con Tom Thibodeau al frente y con dos jugadores franquicia claros, plano del que él ha desaparecido: Karl-Anthony Towns, un pívot con cualidades para ser una súper estrella, y un Andrew Wiggins del que se esperaba más progresión en su segunda temporada pero que sigue siendo uno de los grandes valores jóvenes de la NBA.
A partir de estos jugadores los Wolves están construyendo su futuro y es trabajo de la franquicia evaluar si Ricky entra en él, hasta qué punto y cuándo y cómo podrían obtener más réditos de un posible traspaso. En ese sentido, es obvio que los peor pensados pueden agarrarse a que Taylor trata de no devaluar a su jugador aireando una posible salida. Los Wolves acaban de draftear con el número 5 a Kris Dunn, otro base de descomunal potencial, y muy distinto a Ricky, al que por ahora Thibodeau piensa en colocar como escolta al lado del español. Y como escolta ha jugado principalmente en la Summer League. Los Wolves tienen en Zach LaVine a otro combo guard joven y prometedor y otro base, Tyus Jones, acaba de ser elegido MVP de la Summer League de Las Vegas. Jones fue elegido con el número 24 en 2015 y ya entonces se le vendió como un posible relevo para Ricky, si bien tuvo muy poco protagonismo como rookie (4,2 puntos y 2,9 asistencias por partido).