Derrick Rose: 21 millones sin riesgo llenos de ilusión
Carmelo Anthony, supongo, estará dando palmas con las orejas. Derrick Rose no es ese MVP que maravilló a la Liga en 2011 desde su ciudad natal, y tampoco es el compañero ideal para la estrella de los New York Knicks. Sin embargo, y esto es lo que algunos llamarían destino, llega a la Gran Manzana en el momento perfecto: él quiere demostrar que aún puede ser importante en la Liga, lo mismo que intentará Melo y la razón por la que se desviven los miles de aficionados que llenan cada tarde-noche las gradas de ese templo construido entre la séptima y la octava de Manhattan que te recibe como Madison Square Garden.
27 años, demasiadas lesiones y uno de los mejores nicknames de la NBA. The Windy City Assassin posará junto a Carmelo y Porzingis, y puede que llegue algún otro gigante. Devolverá la ilusión a la Gran Manzana, se comprará un perrito caliente en la esquina de la 33 con la séptima e intentará dejar atrás ese maldito camino que no deja de ponerle obstáculos. Uno de los reyes del crossover ha llegado a Nueva York: 21 millones sin riesgo y llenos de ilusión. Welcome, D-Rose.