La batalla por ser el mejor jugador de la NBA tiene en estas dos últimas temporadas un claro ganador: Stephen Curry. El base de Golden State Warriors ha conquistado dos MVP de forma consecutiva, el último por unanimidad (algo único). Su equipo, además, se llevó el anillo el pasado curso, ha arrasado en esta Temporada Regular (73-9) y, si vence a Oklahoma City Thunder en la final del Oeste, estará en disposición de llevarse el segundo título de campeón de la Liga estadounidense seguido. La última franquicia en hacer esa machada fue Miami Heat con LeBron James como líder indiscutible del equipo y de la NBA.

El alero, ahora en Cleveland Cavaliers, tiene en su poder cuatro premios a mejor jugador. El último fue en la temporada 2012-13 y desde ese curso ha visto como primero Durant y luego Curry le han superado en la carrera por ser el más grande. Y, sobre este último jugador y su galardón, habló. "Stephen definitivamente se lo merecía. Si nos fijamos en sus números, promedió 30 puntos, encabezó la clasificación de robos, tuvo un 90-50-40 (porcentajes de tiro en libres, de campo y tres puntos) y los Warriors ganaron 73 partidos. Por lo tanto, yo no (lo dudo), ¿hay algún debate sobre este premio?”, subrayó El Elegido cuando fue preguntado sobre el MVP. 

Pero ahí no quedó la cosa. Aunque James dio todo el crédito a Curry, hizo alguna matización en el plano semántico: "Creo que la palabra ‘valioso’ y ‘mejor jugador del año’ pueden tener diferentes resultados. Cuando se habla de los más ‘valiosos’, el debate puede ser diferente", comentó. "Hay un montón de jugadores valiosos en nuestra Liga que aportan valor a sus equipos".

Tras estas palabras, el siguiente paso era preguntar a Curry. "Realmente ha sido algo muy bueno para mí ignorar a las personas. Lo he hecho durante los dos últimos años y todo ha ido bien", señaló el base con diplomacia.