Los Lakers probarán al gigante de 2,26 que jugaba al fútbol
Mamadou N'Diaye nació en Dakar y se trasladó en 2010 a Estados Unidos. Los Lakers se plantean hacerse con él si no es drafteado por nadie.
Los Lakers, ya se sabe, esperan a la lotería del draft con los dedos cruzados: traspasaron su primer pick condicionado (protección top 3) por lo que su elección se irá a los Sixers (vía Phoenix Suns, vía llegada de Nash a L.A.) si no es 1, 2 ó 3. Las opciones de los angelinos de tener uno de los tres primeros puestos y quedarse con su pick rondan, como segundo peor equipo de la Regular Season, el 54%. Si tienen suerte, ya han dejado claro que podrían usar esa elección tan alta en algún traspaso si se pone a tiro alguna de las grandes estrellas que podrían moverse en verano (el último en sonar ha sido Paul George). Pero además los Lakers tendrán una segunda ronda muy buena (número 32)... y trabajan con otras opciones creativas y que van más allá del draft.
Una de ellas es Mamadou N’Diaye, un gigante que es como mínimo un proyecto intrigante porque mide 2,26. Nació en Dakar (Senegal) y de niño su gran sueño era ser futbolista. Tardó en jugar al baloncesto pero era una cuestión casi del destino… o más bien de genética. En 2010 se trasladó a Estados Unidos y desde entonces ha trabajado en California, primero en los años de instituto, después en la Universidad de Irvine, donde ha estado tres años y donde ha promediado 12,1 puntos, 7,2 rebotes y 2,4 tapones.
Las dudas sobre él, que le faltan fuerza y movilidad para ser un proyecto de primera categoría (y por eso seguramente no seá drafteado) y que juega en una universidad menor, algo que siempre retrae también a los ojeadores NBA. Pero los Lakers (que necesitan pívot) y los Rockets ya se han interesado por él y piensan en organizar entrenamientos privados para calibrar su potencial en directo y ver si el riesgo podría merecer la pena.