Chris Webber: "El sexto ante los Lakers en 2002 estaba amañado"
El ala-pívot vuelve a recordar la polémica de la final del Oeste 2002 entre Kings y Lakers, una de las mejores series de playoffs de siempre.
“Jugué un partido en el que pasaron cosas muy extrañas, sé lo que sucedió, estoy seguro”. Lo ha repetido otra vez Chirs Webber. Habla de un supuesto amaño arbitral, de una eliminatoria de 2002 y habla ahora porque en Estados Unidos se han comentado mucho sus apasionadas reacciones en televisión tras el polémico final del segundo partido en de la semifinal del Oeste entre Spurs y Thunder, en el que la propia NBA reconoció hasta cinco fallos de arbitraje solo en la última y decisiva jugada del partido que se llevaron los de Oklahoma.
Webber (43 años) vio como las lesiones de rodilla (una pesadilla que comenzó en los playoffs 2003) lastraron una carrera que pudo haber sido la de uno de los grandes ala-pívots de la historia. Dos años antes había firmado un contrato de 127 millones de dólares por siete temporadas en Sacramento, donde entre 1998 y 2003 se movió en números de aspirante al MVP (23 puntos, 10,5 rebotes y 5,4 asistencias por partido en aquella 2002-03). Ya había sido cinco veces all star y había estado en el Mejor Quinteto en 2001. De su año rookie en los Warriors a una etapa en Washington y su recordada estancia en Sacramento antes de, ya lastrado por esas rodillas, terminar en Sixers, Pistons y de nuevo Warriors. Chris Webber nunca estuvo tan cerca de ser campeón como en 2002, cuando los inolvidables Kings de Rick Adelman habían sido el mejor equipo de la Regular Season (el único con más de 60 victorias, 61-21) y se habían metido en la final del Oeste tras pasar por encima de Jazz (3-1) y Mavericks (4-1). Esa final ante los Lakers que ganarían después su tercer título seguido (el tercero de Shaquille O’Neal, Kobe Bryant y Phil Jackson) se saldó con un 3-4 para los angelinos y está considerada una de las mejores eliminatorias de playoffs de todos los tiempos… y también una de las más polémicas.
Dos colosos en una batalla descomunal
Todo coincidió para crear la tormenta perfecta. Los Lakers habían dosificado fuerzas (58-24) durante la temporada, después de sus 67 victorias en la 1999-2000 y su legendario 15-1 en los playoffs 2001. En los cruces se pusieron las pilas: 3-0 a unos Blazers de 49 victorias y 1-4 ante unos Spurs de 58. En la final, después, no dieron opciones a los Nets: 4-0. Pero esa última eliminatoria del Oeste escribió un threepeat de leyenda y escribió la página más maldita en la historia maldita de los Kings, entonces un equipo tremendo (Bibby, Turkoglu, Webber, Divac, Stojakovic, Bobby Jackson…) que conquistó a una generación de aficionados que se incorporaban entonces a la NBA con un estilo de juego absolutamente plástico. Las quejas posteriores de los de Sacramento se centraron en un sexto partido del que años después Tim Donaghy, árbitro que acabó condenado por amaño de partidos, aseguró que se arbitró con la intención de que se llegara a un séptimo y decisivo encuentro para mayor beneficio de la NBA ante el interés que la eliminatoria estaba despertando.
En ese sexto duelo (106-102 final) los Lakers tiraron 40 tiros libres (34/40 por el 18/25 de los Kings)… 27 en el último cuarto. A los pívots de los Kings les pitaron 20 personales (Divac y Pollard fueron eliminados), los árbitros no vieron un codazo de Kobe Bryant a Bibby y Michael Wilbon, del Washington Post, llegó a asegurar que había contado “seis errores arbitrales, todos contra Sacramento, solo en ese último cuarto” en el que los angelinos anotaron cinco canastas en juego… y 21 tiros libres.
La serie fue histórica más allá de la polémica: los últimos cuatro partidos se decidieron en los últimos segundos, hubo dos resueltos con tiros ganadores y el séptimo necesitó una prórroga, en la que los Kings entraron en colapso en su pista. En ese duelo decisivo hubo 16 empates y 19 cambios de mando en el marcador. Antes, quedó para la historia el milagroso triple de Robert Horry (al que le llegó el balón de alguna manera tras fallos de Kobe y O’Neal) en el cuarto partido, que salvó a unos Lakers que habían llegado a perder por 24 en el primer tiempo. Ese ya mítico tiro evitó el 3-1 para unos Kings que habían arrasado en el tercer partido, también en L.A., y se habían repuesto al recital de los Lakers en el primero, que puso el 0-1. Shaquille terminó la eliminatoria con 30,3 puntos, 13,6 rebotes y 2,4 tapones de promedio. Kobe con 27,1 puntos y 6,3 rebotes. Webber con 24,3 puntos, 10,9 rebotes y 6,3 asistencias. Bibby con 22,7 y 4,4 asistencias… fue tan legendario y tan polémico que sigue dando que hablar. Catorce años después…