Cousins y los 'nuevos' Lakers: "Van a ser un buen problema"
Los Kings ganaron en L.A. y firmaron el primer 4-0 ante los Lakers de su historia. Pero su gran estrella, al que algunos ven más fuera que dentro, elogia a los angelinos.
Por primera vez en su historia, en la que han tenido que sufrir demasiadas veces al vecino californiano, los Kings sellaron una barrida (4-0) en sus duelos directos ante los Lakers, que están en un triste 14-54 por el 26-40 de unos decepcionantes Kings, que otra vez implosionaron cuando parecieron tener a tiro la octava plaza de un Oeste que ha resultado más barato de lo previsto esta temporada. En ese partido, DeMarcus Cousins terminó con 22 puntos y 8 rebotes, números mundanos para lo que acostumbra, pero celebró la buena actitud de un equipo que ha vuelto a vivir en serio riesgo de fractura. Y también dejó claro que había visto enfrente a un rival que a pesar de su horrendo presente tiene armas para pensar en un futuro mucho mejor. Son, claro, D’Angelo Russell, Jordan Clarkson y Julius Randle. Para DeMarcus, los Lakers no deberían seguir mucho tiempo en el pozo: “Es solo cuestión de tiempo que los Lakers hagan click y se conviertan en un buen problema. Sus jóvenes tienen un enorme talento. D’Angelo está en el camino, Jordan está en el camino… es cuestión de tiempo”.
Para los más optimistas en L.A., esta afirmación recuerda que ese talento joven es la gran baza con la que los Lakers pueden atraer a agentes libres el próximo verano… o meterse en peleas por jugadores que aparezcan en el mercado. Y DeMarcus parece camino de estarlo. Tiene contrato hasta 2018 (año en el que percibirá 16,7 millones) pero el bache del equipo, precisamente y otra vez cuando pasaba por su mejor momento, ha vuelto a abrir la caja de los truenos. Sus acusaciones directas a un George Karl que tiene casi imposible seguir en Sacramento y algunos gestos durante los partidos que le han devuelto a una versión de sí mismo que parecía olvidada han hecho que, por enésima vez, se cuestione el futuro del pívot, seguramente el mejor de la NBA, en el equipo que le drafteó.