El Bilbao lleva al Valencia a la máxima exigencia: 2 prórrogas
Dos de los damnificados por la Euroliga dejaron un partido glorioso. Soberbia actuación del MVP Hamilton: 39 de valoración. El Dominion no vuela mañana a París tras los atentados.
Dos de los damnificados por el nuevo sistema que trata de implantar la Euroliga se reunieron en Miribilla. Equipos que aspiran a comer terreno a los grandes. Entre ellos hay una notable desigualdad, eso sí. En presupuesto y metros de plantilla. El Bilbao exprime sus recursos como puede y, al calor de su querido infierno de Miribilla, va pegando zarpazos, como al Unicaja hace 15 días. El Valencia maneja un bloque superlativo, sin la excelencia de Madrid y Barça, pero muy por encima de la clase media. Sobrevivió a dos prórrogas para seguir invicto: 11 de 11 entre ACB y Europa. El caso es que ambos brindaron un gran partido en la capital vizcaína. Los pobres, los olvidados por Bertomeu y compañía también engrandecen este deporte. Dos tiempos de cinco minutos regalaron a los ojos de los aficionados y a los que se asomaron a la ventana de Teledeporte.
Sobre un partido decidido en detalles, en balones sueltos, rebotes ofensivos, tiros libres, una bandeja que hace la corbata… emergió Hamilton, una versión aún mejor que Doellman, con cinco centímetros más, una mano más certera incluso y un ramillete superior de recursos. Un top en Euroliga cuando quiera: 31 puntos, 10 rebotes, dos tapones y 39 de valoración. No fallo ni un tiro de los importantes. Al Bilbao, tan decidido para mantenerse en pie con una personalidad rocosa, le faltó temple para solventar el tiempo reglamentario y el primer suplemento. Aplicó mucho coraje y luego la cabeza le iba a cien, no supo enfriarla. Hannah sacó de fondo un balón hacia el espacio aéreo de la zona para que lo interceptase James. Se extravió. Y el propio base americano gestionó mal el final de la primera prórroga. Agotó bote cerca del bocinazo en el minuto 45 y entregó un pase forzado a Bertans, que la cogió a duras penas y no pudo ejecutar un triple en condiciones. Llegó el equipo a la segunda prórroga muy debilitado, sin su guardia pretoriana: Hervelle desfiló al comenzar el tercer acto, por un golpe en la ingle. Acabó en el hospital. Raúl López duró un minuto del primer añadido, ya que fue eliminado por faltas, y Mumbrú le siguió cuando quedaban 59 segundos para esos 45 minutos.
Hannah salió a fuego, con la canasta en el entrecejo, como de costumbre:11 puntos de los 19 iniciales del Bilbao tenían su firma. Cometió dos faltas pronto y se encendió la alarma. Gran toma y daca con un activo Rafa Martínez, en su partido 400 en ACB. Dejan Todorovic protagonizó un rectificado en el aire para otorgar la primera ventaja a los locales: 25-23, a los 13 minutos. Van Rossom y Sikma se chocaron y atropellaron a Bertans, al que para asombro de todos le pitaron la falta. El base belga y Mumbrú tomaron la responsabilidad cuando el balón quemaba.
Los dos equipos se dieron golpes en la mandíbula y siguieron en pie como colosos. Diot debutó en ACB a falta de -13:40. Su equipo llegó a gozar de ventajas de siete puntos. Sato llevó al poste a Todorovic, que hizo un costa a costa con mate a lo Jordan, con el último apoyo desde muy lejos. Pedro Martínez eligió al veterano centroafricano para el tres, y a Sanerme, y castigó a Lucic. Con la lesión de Hervelle, Suárez dio un paso al frente. Fue su mejor partido como 'hombre de negro'. Hubo un momento en el que se dio un pulso Mumbrú-Sanme. Toneladas de clase y determinación.
El equipo bilbaíno no vuela mañana a Nanterre, en el extrarradio de París, al norte, donde tenía que presentarse para jugar el martes el partido previsto de la Eurocopa. el choque está en el aire. El avión que iba a tomar a primera hora no es seguro que salga, así que renunció a él. Se estudian otras alternativas de transporte por si finalmente se disputa el encuentro. Todo se decidirá antes del mediodía. El consejo del Dominion se reunió al final del partido para marcar las pautas a seguir y los jugadores permanecieron en el vestuario a la espera de noticias.