SELECCIÓN ESPAÑOLA

Mirotic, el decimocuarto NBA en la historia de la Selección

El jugador de los Bulls, nacionalizado español en 2010, ha debutado con el equipo nacional. Otros 13 internacionales jugaron antes en la NBA. Eslovenia-Serbia en directo

DANI SANCHEZDIARIO AS

El hispano-montenegrino Nikola Mirotic ha debutado con España después de tres veranos consecutivos en los que se quedó fuera de la Selección. En el primero y en el último Serge Ibaka le quitó el puesto (sólo puede ir un nacionalizado) y en 2013 renunció él. Mirotic es ya jugador español a todos los efectos tras lograr el pasaporte en 2010 por carta de naturaleza y pasar ocho años en Madrid antes de fichar el verano pasado por los Chicago Bulls.

El decimocuarto internacional español que ha jugado en la NBA tras —y van en orden de debut en la gran LigaFernando Martín (86 veces internacional; una plata europea y otra olímpica), Johnny Rogers (16 veces internacional), Pau Gasol (162; un oro mundial, dos oros europeos, dos platas olímpicas, dos platas europeas y un bronce), Raúl López (72; un oro europeo y un bronce y una plata olímpica), José Manuel Calderón (179; un oro mundial, un oro europeo, dos platas olímpicas, dos platas europeas y un bronce), Sergio Rodríguez (98; un oro mundial, una plata olímpica, una plata europea y un bronce), Jorge Garbajosa (167; un oro mundial, un oro europeo, una plata olímpica, dos platas europeas y un bronce), Juan Carlos Navarro (223; un oro mundial, dos oros europeos, dos platas olímpicas, dos platas europeas y un bronce), Rudy Fernández (181; un oro mundial, dos oros europeos, dos platas olímpicas, una plata europea y un bronce), Marc Gasol (152; un oro mundial, dos oros europeos, dos platas olímpicas, una plata europea y un bronce), Serge Ibaka (50; un oro europeo y una plata olímpica), Ricky Rubio (103; dos oros europeos, una plata olímpica y un bronce europeo) y Víctor Claver (104; dos oros europeos, una plata olímpica y un bronce).

Entre todos sumaban, antes de que se alzara el telón de la gira 2015, 1.593 internacionalidades y 62 medallas, 60 de ellas en este siglo XXI (todas menos las dos platas de Fernando Martín). La mejor muestra de la explosión de nuestro baloncesto desde la aparición de los júniors de oro en la Selección hace ya tres lustros con el debut de Navarro y Raúl López en los Juegos de Sidney 2000.

De los trece, el único que tuvo una carrera efímera con España fue el nacionalizado Johnny Rogers. Que se estrenó en los Juegos celebrados en Australia en 2000 con casi 37 años. Su presencia dejó fuera de la lista a Pau Gasol. Doce meses después, no repitió. Rogers, que aterrizó en el Madrid como extranjero en 1988 al tiempo que Drazen Petrovic, había debutado en la Liga norteamericana en el curso 86-87, el mismo en el que lo hizo el pionero Martín. El aluvión de españoles en la NBA no comenzó hasta 2001 con Gasol. El último en llegar ha sido Mirotic. Llull, ya saben, le dijo no a los Rockets hace un mes.

Pero además de internacional y NBA, a Mirotic también se le incluye dentro del grupo de los nacionalizados, igual que a Serge Ibaka y al citado Rogers. La figura del nacionalizado es clave en el desarrollo del baloncesto español. En el primer campeonato en la historia de la Selección, el Europeo de Ginebra de 1935 (se logró la plata), España contó con el salvadoreño Rafael Martín, el costarricense Rafael Ruano y también con los hermanos Emilio y Pedro Alonso (nacidos en Cuba, aunque de padres españoles).

En la década de los cincuenta estuvieron los puertorriqueños Freddy Borrás y ‘Willo’ Galíndez. En los sesenta, el argentino Beltrán de Lassaletta y el venezolano Juan Bautista Urberuaga y, sobre todo, los estadounidenses Clifford Luyk y Wayne Brabender. Ambos podrían ser incluidos entre los diez mejores jugadores de la historia de la Selección Tuvieron una influencia determinante en la explosión de nuestro baloncesto. Luego llegarían ‘Chicho’ Sibilio, Juan Domingo de la Cruz y ‘Chechu’ Biriukov con bastante peso en los ochenta. Y, más tarde, Mike Smith, Rogers, Kornegay, Ibaka… y ahora Mirotic, que a sus 24 años quiere empezar a escribir un capítulo intenso en la historia de la Selección española.

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