Brandon Jennings se ensaña con unos Thunder que no carburan

Los Pistons ganaron en la prórroga a los Thunder (89-96) por dos motivos. En primer lugar, por el gran partido de Brandon Jennings (29 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias, con 25 tantos tras el descanso) y en segundo, por su esfuerzo defensivo final (los Thunder sólo superaron los 20 puntos en el primer cuarto y se quedaron en 7 en el tiempo extra). "Creo que fue nuestra defensa y el poderío en el rebote los que le dieron la oportunidad a Brandon de que entrara en esa racha de acierto", decía Van Gundy, técinco piston, que añadía: "Solíamos ser un gran equipo defensivamente y quiero volver a serlo".

Detroit nunca había ganado en Oklahoma City y este viernes parecía que la historia no iba a cambiar. Los Thunder, algo huérfanos de estrellas sin Duncan y Westbrook, cerraron el primer cuarto arriba en el marcador: 30-21. Pero luego llegó la debacle: sólo 59 puntos en 41 minutos de juego. Jennings puso el empate a 82 a falta de 1:25 para el final y nadie fue capaz de anotar más, aunque Reggie Jackson tuvo el tiro para que el triunfo se quedara en Oklahoma. "Fallé a mis compañeros... ellos jugaron muy bien y nunca pensé que mandaría el partido a la prórroga. Fue culpa mía. Brandon Jennings pudo conmigo. Perdí mi emparejamiento directo y, por eso, perdimos el partido", se lamentaba Jackson.

Después, en la prórroga, continuó el recital de Jennings (8 puntos en el periodo extra) que puso a los suyos tres arriba con un triple a falta de 2:32 (84-87), iniciando un parcial de 12-0 que terminó de sentenciar a los Thunder. Serge Ibaka firmó un nuevo doble-doble en su carrera (19 puntos, 10 rebotes y 2 tapones), al igual que Jeremy Lamb (24 y 10) y Reggie Jackson (20 y 12 asistencias). Los Thunder siguen sin arrancar. Son el cuarto peor equipo del Oeste (3-7) y no han podido encadenar todavía dos victorias seguidas.