PREVIA | THUNDER-CLIPPERS
El deseo de Kevin Durant ante la motivación del ‘We are one’
Westbrook y Durant contra Chris Paul y Blake Griffin. Aparentemente, la mejor serie de todas las semifinales de Conferencia. Ibaka tendrá un papel clave ante Blake Griffin.
QUINTETOS
Thunder: Westbrook, Sefolosha, Durant, Ibaka y Perkins.
Clippers: Paul, JJ Redick, Barnes, Griffin y DeAndre Jordan.
LAS ESTRELLAS, EN NÚMEROS:
Liga regular: 32 puntos, 5'5 asistencias y 7'4 rebotes. 50'3% en tiros de campo, 39'1% en triples.
Playoffs: 29'9 puntos, 3'4 asistencias y 7'9 rebotes. 44% en tiros de campo, 32'1% en triples.
Liga regular: 21'8 puntos, 6'9 asistencias y 5'7 rebotes. 43'7 en tiros de campo, 31'8% en triples.
Playoffs: 25'6 puntos, 8 asistencias y 9'7 rebotes. 38'2% en tiros de campo, 23'8% en triples.
Liga regular: 19'1 puntos, 10'7 asistencias y 4'3 rebotes. 46'7% en tiros de campo, 36'8 en triples.
Playoffs: 17'4 puntos, 9 asistencias y 4'7 rebotes. 42'3% en tiros de campo, 45'9 en triples.
Liga regular: 24'1 puntos, 3'9 asistencias y 9'5 rebotes. 52'8% en tiros de campo.
Playoffs: 23'3 puntos, 3'6 asistencias y 6'3 rebotes. 52'8% en tiros de campo.
PRONÓSTICO
Oklahoma City Thunder 4 - Los Angeles Clippers 2
Thunder y Clippers. Oklahoma City y Los Ángeles. Las grandes llanuras contra el glamour de Estados Unidos. Dos franquicias de éxito reciente que se miden en las semifinales de la Conferencia Oeste. 2-2 en liga regular y una anotación total de 432-428 para OKC. Más igualado, imposible.
El éxito de los Thunder va ligado naturalmente a Kevin Durant y a sus ganas de ponerse el anillo de campeón en uno de sus dedos. A su lado, un Russell Westbrook que en los dos últimos partidos de la serie contra Memphis, cuando peor estaban las cosas y cuando más se presumía que su teórica mala cabeza volvería a actuar, se salió. No me atreveré a decir que ha madurado porque es un jugador imprevisible, pero sí que es cierto que ha dado un vuelco a como había actuado en anteriores series de playoffs. Siempre empezaba bien y cuando llegaba el momento de máxima tensión, se precipitaba. Esta vez fue al revés. Comenzaron, tanto él como Durant, desesperados por una asfixiante defensa de los Grizzlies que les hizo tener unos porcentajes paupérrimos, para llegar al Game 7 e igualar a Rondo como los jugadores con dos triples-dobles en séptimos partidos . Por ahí deben comenzar los Clippers a preparar la eliminatoria.
De la defensa de los exteriores sobre Durant y Westbrook dependerán muchas de las opciones de los angelinos de pasar a la final. A Barnes le tocará Durant y con Westbrook es de suponer que empezará Paul pero que Rivers utilizará muchos minutos a Darren Collison. En la otra zona, durante los cuatro partidos de esta temporada Westbrook y Sefolosha han compartido marcaje sobre Paul. Si los Clippers conceden demasiado al base de los Thunder sufrirán, como les ha pasado con Curry en la serie ante los Warriors. Russell es un base mucho más atlético que Paul, y que casi todos los de la liga, y es casi tan peligroso como Durant. Si aprietan y provocan pérdidas de los exteriores de OKC tendrán mucho ganado. Y para muestra, un dato: en las dos victorias sobre los Thunder este año los Clippers han promediado 10,9 robos por cada 100 posesiones, por los 7,9 que consiguieron en las derrotas. Son dos equipos a los que les gusta mucho correr y que odian el estático precisamente por la condición atlética de sus jugadores.
Uno de los problemas de Oklahoma City en estos Playoffs está siendo la poca participación en ataque del resto de la plantilla cuando Westbrook o Durant no están cómodos. Los dos sufrieron contra Memphis, pero les fue mucho más sencillo cuando, ante la gran defensa de los Grizzlies, la solución era un compañero y no el tiro forzado. Los Thunder necesitan más de Reggie Jackson y de Caron Butler, y necesitan mucho más de Serge Ibaka. De ahí surge la siguiente clave de la serie: la pintura.
Los Thunder son uno de los equipos que mejor rebotea de toda la liga y los Clippers han ganado la serie contra los Warriors gracias a su eficacia en la zona. Ibaka y Perkins contra Griffin y Jordan. A priori será así, pero la diferencia estará en la movilidad de los Thunder hacia ese famoso small ball con Durant de ‘4’ e Ibaka de ‘5’, y de cómo respondan los Clippers a ello. Contra Golden State muchas veces han apostado por Barnes de ‘4’ y Griffin como hombre grande, con Darren Collison o JJ Redick acompañando a Chris Paul y Jamal Crawford por fuera. Con la mejora de Griffin al poste es una opción, pero Ibaka no es David Lee o Draymond Green, le será más complicado. ¿El problema? Durant.
Durant cada día se siente más cómodo posteando y ya es una solución para él cuando no encuentra situaciones favorables por fuera. Un añadido más a su juego. Matt Barnes no tiene el físico de Tony Allen como para poder pararle tanto como lo hizo el de los Grizzlies. Es un buen defensor exterior, pero con KD puede sufrir por dentro. Así que “obligar” a Durant a jugar de ‘4’ y sacrificar la superioridad física de DeAndre Jordan sobre un Perkins que es más lento que él podría ser arriesgado. A Kendrick se le da mejor defender a hombres grandes no tan atléticos pero sí más pesados, como Zach Randolph o como puede ser Glen Davis. Veremos por qué optan Rivers y Brooks. Ni que decir tiene que, ofensivamente, hacer que Brooks aguante con Perkins significa poder hacer dos contra uno a Durant o Westbrook y mejorar las ayudas, dada la poca o nula presencia ofensiva del center thunder. Y lo mismo con Sefolosha. Brooks incluso llegó a apostar por Caron Butler de titular ante los Grizzlies, pero contra Clippers será diferente porque su arsenal exterior es muy superior al de Memphis y Oklahoma necesitará a Sefolosha. Un dato más: en las dos victorias de Clippers sobre OKC este año, los de L.A. dejaron a los Thunder en 8,5 rebotes ofensivos y 34 totales. Lejos de sus guarismos habituales (11 y 45,5). Cuando ganó Oklahoma recogió 10 ofensivos y 46 en total. El rebote, una de las claves.
Por último, Donald Sterling. No se sabe cómo ha podido llegar a afectar a la plantilla de los Clippers la polémica que ha rodeado a la franquicia después de la sanción a su dueño por aquellos comentarios racistas. Motivación o distracción. Lo cierto es que están ante una oportunidad única de llegar lejos en unos Playoffs donde nadie es favorito y, a la vez, de demostrar que están por encima de cualquier situación. El ‘We are one’ ya es un grito unánime en la liga y el equipo está en el punto de mira de todos los aficionados. Además, con Chris Paul al mando, Blake Griffin siendo mucho más que ‘sólo mates’ y Doc Rivers de entrenador se puede aspirar a cualquier cosa. Como último dato: en los últimos 20 años sólo siete veces el MVP de la liga regular se ha llevado el anillo y otros tres perdieron las Finales.