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A SU MEJOR NIVEL

El mejor pívot puro de la NBA se siguen llamando Dwight Howard

Recuperado de sus problemas de espalda y feliz en unos Rockets que son el mejor equipo de 2014, Howard volvió a demostrar ante Hibbert que no hay 'center' como él.

El mejor pívot puro de la NBA se siguen llamando Dwight Howard
Bob LeveyAFP
NBA

 Y el mejor pívot de la NBA es… Dwight Howard. Otra vez, después de la dwightmare y de haber vivido con la espalda y el hombro hechos unos zorros, del psicoanálisis permanente al que le sometió América, de la caída en desgracia –ganada a pulso- de su imagen pública y de casi dos temporadas jugando renqueante y sin la explosividad de sus mejores días. En los Lakers, por cierto, con todos sus problemas físicos y todo lo que llovió en el entorno, promedió más de 17 puntos y 12 rebotes por partido.

Llegó a Houston y casi le enterramos sin darle tiempo a acoplarse a su nuevo equipo (a acoplarse con Harden) y a quitarse el óxido de unos músculos que se iban poco a poco acercando a su mejor nivel de rendimiento. Personalmente me decepcionó profundamente ver a un Howard casi impasible cuando dejó que los Lakers ganaran en su pista en su primer duelo contra ellos. Olvidé que su imborrable sonrisa es a veces sólo una mueca y otras, poco más que un mecanismo de defensa. El resto, va de serie. Hace días reconocía que nunca dejaría de tomarse la vida como un regalo: “Nací demasiado pequeño, mi padre me podía sujetar con la palma de una mano… estuvo a punto de no salir adelante. En cierto modo, es como si no debiera estar aquí. Pero estoy, lo logré y por eso encaro cada día como si fuera un regalo”. El recién nacido minúsculo mide ahora 211 centímetros, tiene una envergadura que ronda los dos metros y una estructura física que es maquinaria pesada imparable en alianza con la gravedad, rematada por unos hombros que son bolas de demolición y que utiliza para desmantelar rivales en ataque.

A los Rockets ya los bautizamos como la sensación de 2014 y desde entonces sólo han ido a mejor: acaban de ganar a los Heat y a los Pacers y son el mejor equipo desde el 1 de enero, ya 22-6. Una máquina infalible si supera los 100 puntos, 21 triunfos seguidos si anota en tres cifras, con una rotación ya bien establecida de nueve piezas con roles perfectamente definidos. McHale ha sabido conjugar el juego uptempo de la pasada temporada que bendice a Harden y Parsons con los sistemas a media pista que hacen demoledor a Howard, el ancla de un equipo en el que es el único miembro del quinteto titular que supera los 25 años. Su presencia justifica que los Rockets sean ya la duodécima mejor defensa de la NBA sin más especialista defensivo a su lado que el base Patrick Beverley.

Howard, más allá de los números, superó la pasada noche en los dos lados de la zona a Roy Hibbert, que se está metiendo en un pozo de tales dimensiones que hasta peligra un premio de Defensor del Año que parecía suyo hasta el All Star. El de los Pacers va de tormento en tormento cuando se mide a Howard: 10 partidos, 7 derrotas y apenas 8 puntos y 5,7 rebotes de media con un 37% en tiros. Hibbert, desde luego, está en la elite de los centers que han recuperado la dignidad de una profesión que el nuevo estilo de juego amenaza con llevar a la extinción. Y tranquilos, en el próximo draft llegará Joel Embiid. Se puede defender que el de Georgetown podría ser el mejor '5' de la NBA y desde luego se puede sostener la candidatura de Joakim Noah, sus triples-dobles y sus partidos de 14 asistencias (casi 7 de media en la imprevista crecida de los Bulls), y de Marc Gasol, el ancla más allá de las estadísticas de casi todo lo bueno que hacen tanto en defensa como en ataque los Grizzlies. Howard, Hibbert, Gasol y Noah: seguramente, y ahora mismo, los cuatro pívots más trascendentes en el juego de la NBA.

Detrás de ellos asomaría Al Horford, que se ve como un '4' pero al que los Hawks usan de '5' y es en definitiva un martillo en las dos posiciones. En el futuro la liga podría estar dominada por el talento de Cousins o la consistencia gigantesca de Drummond, que superó estrenando marzo los rebotes de ataque del que más había conseguido en toda la temporada pasada y ya lleva 333. No hay muchos pívots con la producción de Al Jefferson ni con la capacidad anotadora de Brook Lopez, que sigue ahí, o el especialista Nikola Pekovic. También por detrás del primer escalón asomarían, mientras esperamos a saber quién es realmente Nerlens Noel, DeAndre Jordan, Andrew Bogut o Tyson Chandler.

Pero el mejor, hoy por hoy otra vez el más determinante en su puesto, vuelve a ser Dwight Howard. En el duelo ante Miami Heat demostró que, otra vez en su mejor nivel físico, es tan decisivo en la defensa de la pintura como Hibbert. Y aunque nunca será un virtuoso, su tosco juego al poste es superior al de Noah o Drummond. De hecho el juego de ataque de Howard, o al menos su capacidad para sumar y ser una amenaza que libera a los tiradores, sigue siendo infravalorada por muchos. O tal vez habría que decir que hablamos de un especialista defensivo capaz de producir 20 puntos todas las noches: esta temporada 18,9 con un 59% en tiros de campo. Y 12,4 rebotes. Dicho de otro modo: Howard ha pasado por traumas de inmadurez, problemas físicos serios y un escrutinio que hubiera pulverizado a muchos con una carrera que va camino ya de los 14.000 puntos y los 10.000 rebotes.

Y 8 All Stars, y 7 presencias en el Mejor Quinteto y 3 premios de Mejor Defensor… y una final disputada con unos Magic en los que los siguientes mejores jugadores eran Hedo Turkoglu y Rashard Lewis. Ambos excelentes en aquel equipo pero ninguno una súper estrella. En aquellos playoffs de 2009 promedió más de 20 puntos y 15 rebotes por partido y su presencia en la zona era un imán que encogía las defensas rivales y permitía a sus compañeros, siempre cuatro abiertos, montar un campo de tiro que abrasó a los Cavaliers de LeBron y a los Celtics del Big-Three.

Veamos como se sitúan los pívots que juegan en esa posición de '5' puro en las categorías estadísticas que más les afectan:

Puntos por partido

  1. (10º en el total de la NBA): DeMarcus Cousins: 22'3
  2. (14º) Al Jefferson: 21'3
  3. (26º) Dwight Howard: 18'9
  4. (29º) Nikola pekovic: 18
  5. (45º) Nikola Vucevic: 14'1

Rebotes

  1. (1º en el total de la NBA): DeAndre Jordan: 13'9
  2. (3º) Andre Drummond: 12'9
  3. (4º) Dwight Howard: 12'4
  4. (5º) DeMarcus Cousins: 11'5
  5. (6º) Joakim Noah: 11'3

Rebotes defensivos:

  1. (2º en el total de la NBA): DeAndre Jordan: 9'9
  2. (3º): Dwight Howard: 9'1
  3. (5º) DeMarcus Cousins: 8'4
  4. (6º) Al Jefferson: 8'4
  5. (9º) Joakim Noah: 7'7

Rebotes Ofensivos:

  1. (1º en el total de la NBA): Andre Drummond: 5'4
  2. (2º): DeAndre Jordan: 4'1
  3. (3º): Nikola pekovic: 4
  4. (4º) Robin Lopez: 4
  5. (5º). Joakim Noah: 3,6

7 y 6º: Dwight Howard: 3,3

Tapones:

  1. (3º en el total de la NBA): Roy Hibbert: 2'5
  2. (4º): DeAndre Jordan: 2'4
  3. (7º): Andrew Bogut: 1'9
  4. (8º): Andre Drummond: 1'8
  5. (9º): Dwight Howard: 1'8

Tiros de Campo:

  1. (1º en el total de la NBA): DeAndre Jordan: 66%
  2. (2º): Andre Drummond: 61,7%
  3. (3º): Dwight Howard: 59%
  4. (5º): Al Horford: 56,7%
  5. (11º): Marcin Gortat: 54%

Howard no es el líder en ninguna categoría pero está muy arriba en todas: es mucho más completo de lo que aparenta su estilo y su forma de tirar los tiros libres y, con 28 años y en plena acceso a la madurez, afronta los que deberían ser los mejores años de su carrera. Más allá de los números, que de una u otra forma siempre le dan la razón, las sensaciones vuelven a elevar a D12, antaño The Beast in The East, por encima del resto de pívots de la NBA y en el lote más selecto de mejores jugadores de la liga. Y en Houston, 22-6 en 2014, ya son plenamente conscientes de ello.