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Eurobasket | La intrahistoria

El día que Dusan Ivkovic se negó a dar la mano a Díaz-Miguel

Desde que dirigiera por primera vez a la antigua Yugoslavia, en 1989, no para de crecer el anecdotario del severo Ivkovic, que cría palomos de competición en sus ratos libres.

Dusan Ivkovic
AFP

A sus casi 70 años, Dusan, Duda, Ivkovic, el riquísimo seleccionador de Serbia, lo ha ganado todo como técnico, excepto un oro olímpico. Ayer, en el Stozice Arena de Liubliana, Ivkovic fustigaba a sus jóvenes jugadores de Serbia­ para que se sacudieran ese shock del que el pívot Nenad Krstic se hace eco: "Debemos olvidar que hemos sido primeros de nuestro grupo en la segunda fase y pensar sólo en cómo defender a los bases y escoltas de España".

Desde que dirigiera por primera vez a la antigua Yugoslavia, en 1989, no para de crecer el anecdotario del severo Ivkovic, que cría palomos de competición en sus ratos libres y es amante de cantar bingos. En julio de 1990, durante un torneo amistoso en A Coruña­, Ivkovic recibió un horario equivocado de entrenamiento y se presentó en la pista con el gran equipo de la antigua Yugoslavia, incluidos Drazen Petrovic y Divac: a la misma hora en la que entrenaba la Selección española a las órdenes de Antonio Díaz-Miguel.

El técnico español se cerró en banda y recomendó a Ivkovic y los suyos que se dieran "una vuelta por la ciudad" y que volvieran después de una hora. Al día siguiente, en el partido (ganó Yugoslavia), Ivkovic­ se negó a estrechar la mano que le presentó Díaz-Miguel.