Ricky y los Wolves vencen a Calderón y los Pistons

Ante 15.311 espectadores en el Target Center de Minneapolis, y en el duelo de bases españoles internacionales, Ricky Rubio (que ha sido advertido por la NBA por simulación o ‘flopping’ al intentar cobrar una falta en ataque a Kevin Durant) llevó la ventaja y disfrutó del triunfo, en la victoria número 1.000 en la NBA de su entrenador-jefe, Rick Adelman (que se abrazó emotivamente con su mujer, Mary Kay, recuperada tras una enfermedad). Los Timberwolves de Rubio, triunfadores en tres de sus cuatro últimas citas, batieron por 107-101 a los Detroit Pistons de José Manuel Calderón. "Si alguien tenía que estar aquí hoy conmigo, era ella", dijo Adelman, apuntando a Mary Kay.

Adelman es el octavo entrenador de la NBA que llega al millar de triunfos, tras Nelson, Wilkens, Riley, Jackson, Sloan, Brown y Karl. No fue el mejor día de Ricky Rubio en tiros de campo (1/13), pero su 8/9 en tiros libres le aupó a la decena exacta de puntos… además de cinco rebotes, seis asistencias y cinco robos de balón a través de 31:56 en pista. A 54 segundos del final, el único tiro atinado de Ricky, una suspensión, abrió una brecha crucial de 102-99 para los Wolves. En ese momento, y en un tramo de los últimos cuatro minutos del partido, Rubio había firmado seis puntos consecutivos de los Wolves, del 96 al 102. A 44,7, una bandeja de Brandon Knight (25 puntos), acortó el margen: 102-101. Fallaron Budinger y Ridnour, en un segundo intento desde la personal, pero con 103-101 y en su sexto rebote ofensivo, Nikola Pekovic atrapó ese rechace de Ridnour, que volvió a ser objeto de falta y esta vez anotó los dos tiros. Ya con 105-101 y a 6,9 del desenlace, Rodney Stuckey no pudo abrochar su excelente noche (20 puntos, ocho rebotes) y falló un triple agónico. Greg Monroe (16 puntos) hizo falta a Pekovic, que había reboteado, y el muro serbio de los Timberwolves cerró el partido con otros dos tiros libres: en total, 107-101… y 20 puntos más 13 rebotes en la cuenta del imponente Pekovic.

Calderón regresaba con los Pistons tras curar de sus molestias en el brazo derecho y aportó seis puntos (3/5 en tiros), dos rebotes, cuatro asistencias y tres robos. Brillaron algo más sus compañeros en la pista trasera de los Pistons, los ya citados Knight y Stuckey. Los Wolves (43,4% de aciertos) cedieron en la cuenta de rebotes (38-41) y permitieron a los Pistons acertar con el 53,3% de tiros, pero al club de Detroit le condenaron sus 24 pérdidas de balón, diez más que sus rivales de Minnesota. Los Timberwolves, muy equilibrados, tuvieron a siete jugadores en diez o más puntos, con 20 para el base J. J. Barea y el citado Pekovic. Derrick Williams aportó 14. Y Andrei Kirilenko, 13.