Somos cada día más sectarios, peores. Por no hablar de las redes sociales...
No hay palabras para agradecer semejante talento, no hay valiente que los haya quitado...
Como Vinicius y Dembélé. El primero es desborde arrollador, el Niágara, una manada de búfalos en un solo hombre, el segundo un funambulista que no sabe lo que va a hacer hasta que lo ha hecho.
Se le presentó el dragón al Barça en el primer minuto. El balón suelto que Griezmann convirtió en rosca simbolizaba todos los males pasados...
Ni un pero se le puede poner al Barça en cuanto al desempeño de ayer en el primer tiempo del Clásico, hecho borrado por la malísima imagen del segundo.
“Vestuario y aficionados no tienen nada que ver con el escándalo...”
Continúa el Barça con su indignante ejercicio de cinismo disfrazado de estrategia de supervivencia. Los hechos son graves y atentan contra las mismas bases del cruyffismo: gana jugando mal.
Este episodio ensucia los éxitos, pues autoriza a sospechar de ellos. Nos roban a los culés.
El equipo sabe que o se reengancha a su historia ganando o caerá en la irrelevancia...
El Barça ganará la guerra al fútbol aguerrido, tacitista y científico con cultura ‘cruyffista’
Los supuestos muy buenos jugadores que conserva el Barça, no muchos, han rendido poco.
Hay algo hermoso y triste a la vez en el Mundial que nos está regalando Leo Messi. Como la vida, un fogonazo agridulce, nada más; nada menos. Quiero escribirlo para leerlo cuando no me acuerde de nada.
Lo han escogido porque representa muchas cosas y es una bandera que aguantará el viento
Lo que se le aplaude al máximo rival, la resistencia a la derrota jugando mal, en el Barça no vale
Lo que han tratado de explicar los filósofos, contar los poetas y cantar los bardos quedó bien reflejado en la despedida de Roger Federer en Londres.
El que creyó, quiso y pudo fue Lewandowski. Que eligiera el Barça es para no olvidarlo
Le pediría a Laporta y Alemany que terminaran de realizar sus gestiones con algo menos de incertidumbre: no hay fichaje que no haya estado a punto de no realizarse.
No se ría, Samuel es hoy mejor que Philippe hace veinte años, sano. Así está el Barça
Estoy harto de cómo son algunos barcelonistas: parece que hay que ganar con música de violines y sin sudar.
Página1