De la prometedora generación del 2002. Actualmente está viviendo lo que hace una década soñó. Nunca renuncia a las grandes emociones que el deporte despierta. Apasionado del fútbol de Sudamérica, por eso siempre está pendiente de lo que sucede en la Conmebol. En su agenda siempre hay un hueco reservado para el futsal.