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ACTUALIDAD

Grave caída de la población de vertebrados desde 1970

WWF avisa de la disminución de estas especies en los últimos 50 años y advierte de que esta pérdida de biodiversidad entraña muchos riesgos para la población.

Bancos de peces murciélago en Pecio Machchafushi
Sergio HANQUET

Un informe elaborado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) señala que las poblaciones de animales vertebrados (peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos) disminuyeron un 69% entre 1970 y 2018. Las razones, indica el estudio, serían seis amenazas principales: la agricultura, la sobreexplotación de la vida silvestre, la tala de árboles, la contaminación, las especies invasoras y el cambio climático.

El ‘Informe Planeta Vivo 2022′, que elabora WWF cada dos años analiza las tendencias globales en la biodiversidad y la salud de la Tierra y estudia la evolución de la población de vertebrados en 32.000 poblaciones de 5.230 especies de peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos de todo el mundo. La conclusión a la que llega es que la abundancia de especies de vertebrados ha caído una media del 69% desde 1970 a 2018.

“Doble emergencia”: crisis climática y pérdida de biodiversidad

Por tanto, WWF avisa de la “doble emergencia” que supone la crisis climática y la pérdida de biodiversidad y señala las repercusiones que puede ocasionar como el aumento de la inseguridad alimentaria, la falta de acceso a agua dulce o el aumento de la expansión de enfermedades zoonóticas. Las personas más pobres, aseguran, son las que más riesgo tienen de sufrir estas consecuencias.

El informe explica que para mitigar esta doble crisis ambiental hace falta aumentar los esfuerzos de conservación y restauración, la producción y el consumo de alimentos de forma más sostenible y la rápida y profunda descarbonización de todos los sectores.

Petición a los líderes mundiales

Por eso, se pide a la clase política mundial que se transformen las economías para que los recursos naturales sean valorados como se debe, puesto que no será posible lograr un futuro positivo para la naturaleza sin reconocer y respetar los derechos, la gobernanza y el liderazgo en conservación de los pueblos indígenas y las comunidades locales de todo el mundo.

En este sentido, WWF recuerda que en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones se reconoció el pasado año que todas las personas tienen el derecho a vivir en un medio ambiente limpio, saludable y sostenible.

“Podemos construir un futuro en el que puedan prosperar tanto las personas como la naturaleza. Para ello es imprescindible incluir nuevos enfoques que integren la equidad, la justicia y los efectos del cambio climático y la pérdida de naturaleza, además de cambios sistémicos que aborde la forma en que producimos y consumimos, la tecnología que usamos y nuestros sistemas económicos y financieros. Para impulsar tales cambios hay que dejar de hablar de metas y objetivos para hablar de valores y derechos, tanto en la concepción de políticas como en la vida cotidiana”, ha declarado Juan Carlos del Olmo, secretario general de WWF España.