Aviso de una reputada experta a los vacunados sobre Ómicron
Rosemary Boyton asegura que las personas que contrajeron COVID-19 en la primera ola no reciben “ningún refuerzo inmunológico” de Ómicron, gracias a un estudio publicado en la revista Science
Las personas que contrajeron coronavirus durante la primera ola de la pandemia no obtienen un impulso en su respuesta inmune si más tarde contraen Ómicron, según informa un estudio de personas vacunadas triplemente. La variante Ómicron llegó a finales de 2021 dejando unas Navidades para la historia en las que los nuevos contagios diarios se dispararon hasta cifras nunca vistas y sembró de nuevo el miedo.
Los expertos aseguran que si bien tres dosis de una inyección de coronavirus ayudan a proteger a las personas frente a resultados graves en caso de que contraigan Ómicron, las infecciones previas pueden afectar su respuesta inmunológica directa e indirectamente.
“Si se infectó durante la primera ola de la pandemia, entonces no puede aumentar su respuesta inmunológica si tiene una infección por Ómicron”, aseguró la profesora Rosemary Boyton, del Imperial College London, coautora del estudio.
“No es buen refuerzo de inmunidad”
Además, los investigadores también descubrieron que una infección por Ómicron ofrecía poca protección adicional contra la posibilidad de volver a contraer la variante. De esta forma, Boyton explicó: “Cuando Ómicron comenzó a volar por todo el país, la gente seguía diciendo que estaba bien, que eso mejoraría la inmunidad de las personas”.
Asimismo, agregó que a lo que ellos están haciendo referencia es que “no es un buen refuerzo de inmunidad”. Y es que el equipo aseveró que los hallazgos pueden ayudar a explicar por qué las reinfecciones con Ómicron en un período de tiempo corto han sido tan frecuentes, y añadió que los hallazgos también fueron importantes para el desarrollo de las vacunas.
Seguimiento a trabajadores de la salud en Reino Unido
Todo ello se debe al seguimiento de las experiencias de vacunación e infección de los investigadores a 731 trabajadores de la salud vacunados triplemente en Reino Unido, desde marzo de 2020 hasta enero de 2022. Posteriormente, el equipo usó muestras de sangre recolectadas de los participantes en las semanas siguientes a su tercera dosis de vacuna para determinar sus respuestas de anticuerpos y células T hacia la variante Ómicron, BA.1.
Los participantes variaron considerablemente en términos de su historial de coronavirus, incluso si habían tenido una infección previa de coronavirus y, de ser así, la variante involucrada. Los resultados exhibieron que, independientemente del historial previo de los participantes, pocas semanas después de su tercera inyección de coronavirus, sus niveles de células T contra las proteínas Ómicron eran bajos, mientras que los niveles de anticuerpos contra las proteínas Ómicron eran más bajos que contra otras variantes.
El estudio planteó otras preocupaciones
Por último, el equipo manifestó que la infección con Ómicron aumentó la protección contra futuras infecciones con otras variantes. Sin embargo, solo ofreció un impulso limitado a la protección contra otra infección de Ómicron, una respuesta que, en realidad, se debilitó entre aquellos que habían tenido con anterioridad la cepa original del virus.
Los investigadores dijeron que el hallazgo fue sorprendente, debido a que se suponía que la infección previa, incluso de una nueva variante distinta, actuaría para estimular la respuesta inmunitaria de un individuo. No obstante, esto planteó otras preocupaciones, tal y como declaró el profesor Danny Altmann, el otro autor del estudio: “No estamos obteniendo inmunidad colectiva, no estamos generando inmunidad protectora contra Ómicron. Entonces nos enfrentamos a no salir del otro lado de las infecciones, reinfecciones e infecciones avanzadas”.
Características de Ómicron
Ómicron está caracterizada por una capacidad de infección superior a cualquiera de las variantes previas que han aparecido. Con ella, aparecen otros síntomas menos comunes anteriormente, como son el dolor de oídos y el malestar muscular y general. Mientras, se mantienen otros comunes a otras variantes como la fiebre, la tos, el cansancio y el dolor de cabeza y de garganta.