La vacuna española contra la COVID-19 avanza por el buen camino y a buen ritmo. Así lo ha comunicado Isabel Sola, viróloga y subdirectora del Consejo Superior Investigaciones Científicas (CSIC) en una entrevista con la Cadena SER como parte de la investigación y el desarrollo de esta vacuna española contra el coronavirus que, esperan, poder añadir a las campañas de vacunación lo antes posible, junto a las ya aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento -Pfizer, Moderna y AstraZeneca, hasta el momento-.

La navarra apunta que “el trabajo va avanzando poco a poco” ya que “en ciencia todo cuesta mucho”. Sin embargo, insiste en que la vacuna española, desarrollada por el CSIC, “va por buen camino, aunque tenemos que tener todavía un poco de paciencia antes de tener una vacuna que pueda distribuirse y que pueda aplicarse a las personas, pero las cosas van por buen camino, estamos optimistas”.

El CSIC, pendiente de las mutaciones

Pese al avance de la vacuna española, el CSIC tiene la vista puesta en la llegada de posibles mutaciones del coronavirus. La variante británica, la brasileña o , sobre todo la sudafricana, han puesto en duda la eficacia de las vacunas ya existentes, las que se están utilizando en las campañas masivas de vacunación."Es inevitable que los virus muten y vayan cambiando y por lo tanto una de las cuestiones que hay que tener en cuenta en las vacunas que ya están admimistrándose, es ir confirmando si mantienen la efectividad que tenían frente al virus original”, comenta Isabel Sola.

“Parece ser que sí que mantienen efectividad, aunque en algunas de ellas en los experimentos que se hacen en el laboratorio parece que el virus consigue escaparse un poco, no lo suficiente como para pensar que la vacuna no es efectiva, no, al contrario, las vacunas mantienen efectividad pero hay que vigilar esta cuestión por si fuera necesario de alguna forma reformular, actualizar las vacunas para que sigan teniendo la máxima efectividad posible", añade la navarra.