Chiefs y Rams: el reto del Azteca
Finalmente lo sabemos. El partido que tendremos en México este año será entre Chiefs y Rams, dos equipos que no son precisamente los más populares en nuestro país.
Finalmente lo sabemos.
El partido que tendremos en México este año será entre Chiefs y Rams, dos equipos que no son precisamente los más populares en nuestro país.
Eso no quiere decir que el Estadio Azteca no se llenará o que éste será un partido poco atractivo.
Son dos campeones divisionales que el sábado juegan como locales en la ronda de Wild Card y que probablemente los veremos con vida al menos una semana más en estos Playoffs.
¿Qué tanto puede llamar la atención este juego en 2018?
Según encuestas de la liga, durante la última década, el número de fanáticos de la NFL en México ha crecido hasta 20.6 millones, dijo recientemente Arturo Olivé, quien maneja las operaciones de la NFL en nuestro país.
Obviamente, no todos esos seguidores son “ávidos” o “hard core”. De hecho, la minoría lo son; la mayoría son aficionados llamados “casuales”.
Así que un partido entre Chiefs y Rams pondrá a prueba muchas cosas, entre otras, el nivel de promoción mediática que se necesita cuando no hay Patriots ni Raiders en el Azteca, y la respuesta de una afición ante un juego de “bajo perfil” con los precios acostumbrados, o incluso más caros con el reciente alza del dólar.
La Secretaría de Turismo estimó el año pasado superar la derrama económica de 2016 (Raiders vs. Texans), que fue de 295 millones de dólares.
Seguramente lo lograron. Pero eso fue, insisto, con Patriots (el tercer equipo más popular en México, sólo detrás de Pittsburgh y Dallas) y Raiders (en el Top 10).
Meter 90 mil personas al Azteca con un Chiefs vs. Rams es todo un reto, pero el aficionado mexicano sabe apreciar y valorar que un partido de esta liga, prácticamente con cualquier equipo, es un espectáculo que se cuece aparte.