CINE

La difícil transformación de Robert Pattinson en ‘The Batman’: “Contaba los sorbos de agua”

El actor ha conseguido ponerse en la piel de Bruce Wayne, pero para ello ha tenido que cuidarse mucho físicamente y limitando su alimentación.

English actor Robert Pattinson arrives for "The Batman" world premiere at Josie Robertson Plaza in New York, March 1, 2022. (Photo by ANGELA WEISS / AFP) (Photo by ANGELA WEISS/AFP via Getty Images)

En la industria del cine, muchas son las ocasiones en las que interpretar a un superhéroe supone todo un reto, no solo porque debes meterte dentro de un traje -generalmente de malla-, sino porque el papel también requiere de una gran preparación física, como a la que se ha sometido Robert Pattinson para convertirse en Batman, en ‘The Batman’, que ha llegado a los cines en España este mismo viernes.

Una transformación física que ha requerido de un gran trabajo en el gimnasio, pero también en la alimentación, tal y como ha confesado en una entrevista concedida a la revista ‘People’. “Tuve unos tres meses antes de que comenzara la película, y luego haces ejercicio antes y después del trabajo, todo el tiempo”, ha comenzado explicando.

Un gran esfuerzo con la alimentación

Y es que en dicho papel también ha tenido que rodar escenas sin camiseta, algo que le ha motivado para ponerse más fuerte y fibroso: “Oh sí. La vergüenza es mi mayor motivación, 100%”. Pero, sobre todo, el actor tuvo que hacer tal sobreesfuerzo en su alimentación que se llegó a obsesionar con ello. “Simplemente cortas y cortas antes del par de escenas sin camiseta, contaba los sorbos de agua”, ha confesado.

El esfuerzo fue titánico, pero mereció la pena por el personaje, y es que cuando Pattinson se puso el traje por primera vez, sintió algo muy especial: “Tiene un poder elemental. Todo tu mundo cambia repentinamente [...] Y luego captas un vistazo, como el reflejo sutil o una sombra en el suelo, y te das cuenta de que el personaje es mucho más grande que tú”.

No es la primera vez que tiene que pasar hambre por un papel, y es que ya confesó a la revista en 2016 que para ‘La ciudad perdida de Z’ estuvo un tiempo sin comer: “Literalmente no comí nada durante todo el tiempo”.