Jada Pinkett Smith habla sobre sus adicciones al alcohol, marihuana, éxtasis y porno: "Soy un milagro andante"
La mujer de Will Smith ha confesado que a lo largo de su vida ha tenido que superar varios problemas de adicción relacionados con las drogas, pero también con la pornografía.
‘Red Table Talk’, el programa familiar que presentan Willow Smith, Jada Pinkett Smith y su madre, Adrienne Banfield-Norris, que se emite en Facebook Watch y que ha ganado recientemente un Emmy, se ha convertido en un espacio en el que los célebres invitados que acuden comparten sus confesiones más íntimas sin ningún tipo de filtro.
Pero quizá parte de su éxito radique en que las propias conductoras del show comparten sin tapujos sus miserias. Tal es el caso de Jada Pinkett, esposa de Will Smith, que ha compartido frente a las cámaras el cóctel de adicciones que le acompañaron durante años: “Soy un milagro andante”, asegura en la última emisión de su programa.
"Beber vino tinto para mí era como beber vasos de agua. Como estaba acostumbrada bebía mucho en la escuela secundaria. Y cuando salía tomaba mi cóctel: éxtasis, alcohol y marihuana. Cómo decirlo, me divertía un poco. No pensaba que fuera una adicción, pero el umbral de tolerancia era cada vez más elevado y cada vez consumía más rápido y más cantidad”, añade.
Pinkett, de 49 años, reconoce que durante una época daba rienda suelta a sus adicciones de “jueves a lunes”, hasta que tuvo un susto durante el rodaje de El profesor chiflado (1996). “Tuve una mala racha de consumo de éxtasis y me desmayé. Le dije a todo el mundo que había tomado medicamentos en mal estado. Fue la última vez”, zanja.
Relación "poco saludable" con el porno
Pero los problemas de adicción de Jada Pinkett Smith, como confesó en su momento, no se han limitado solo al consumo de sustancias ya que durante una etapa de su vida la pornografía también se convirtió en un escollo.
"No estaba con nadie cuando tuve una relación poco saludable con la pornografía en un momento de mi vida en el que estaba tratando de practicar la abstinencia. Recurrí a la estimulación externa porque sentía un vacío, aunque supuso un problema al crearme falsas expectativas cuando se trataba de interactuar con parejas reales”, explicaba la actriz, que afortunadamente para ella dejó atrás hace mucho tiempo su época más oscura.