CINE

La razón por la que Anya Taylor-Joy casi deja el cine: "Pensé que no volvería a trabajar"

La actriz que fue toda una sensación gracias a 'Gambito de Dama' ha hablado de su vida en la interpretación, revelando que estuvo a punto de ponerle fin.

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Imagen de Anya Taylor-Joy durante su papel en 'Gambito de Dama'.

El mundo de la actuación resulta de lo más complicado para algunos actores, y es que un mal papel puede dar lugar a hechos tan trágicos como dar por finalizada tu carrera. Una sensación que tuvo Anya Taylor-Joy, la actriz conocida en el mundo entero por dar vida a Beth Harmor en 'Gambito de Dama', una de las sensaciones de Netflix en los últimos tiempos.

Gracias a esta serie consiguió llevarse el Globo de Oro, pero luego obtuvo nuevos papeles, como en la película 'Última noche en el Soho', convirtiéndola en una actriz al alza. Sin embargo, no tuvo esta misma suerte en 2015, en su primer papel en la película 'La Bruja', a pesar de que antes quiso interpretar a Jolie en 'Maléfica', un papel que no ganó.

"Fue mi primera actuación. Quería con todas mis fuerzas ese papel. Era Disney y me encanta Angelina. No me parezco en nada a ella, así que era imposible conseguirlo, pero era un poco ingenua y pensé: 'Los milagros pasan'", ha confesado en una entrevista a The Hollywood Reporter.

Fue entonces cuando recibió su oportunidad en 'La Bruja': "No pasó mucho tiempo y me preguntaron para hacer la audición en 'La Bruja', así que fui y grabé, pero nunca pensé que me lo fueran a dar, porque el personaje de Thomasin lo describían como simple. Y pensé: 'Bien, hay muchas cosas que puedo hacer, pero no puedo cambiar mi cara demasiado".

Acabó devastada tras 'La Bruja'

Tras rodar la película, Anya ha contado cuáles fueron sus sensaciones al verla: "Rob nos enseñó la película unas dos horas antes de la proyección a la audiencia, y estaba devastada. Pensé que no volvería a trabajar nunca más, todavía tengo escalofríos cuando pienso en ello".

"Era ese sentimiento horrible de pensar, 'Acabo de decepcionar a la gente que más quiero en el mundo. No lo he hecho bien'. Y soy muy habladora, me encanta hablar, comunicar. Ese día no hablé, simplemente lloré. No podía soportar ver mi cara así", ha añadido.

Y es que después de aquello, y de haberse planteado la retirada, la actriz tuvo la oportunidad de cambiar su imagen con 'Gambito de Dama': "Ese fue el año que más me cambió. Me volví a enamorar de mi trabajo. Me habían dado un toque, y hasta se me olvidó que este trabajo me da de comer. Me sentí como si, por un tiempo, lo hubiera alimentado, si es que tiene algún sentido".