La actriz Andra Day se confiesa sobre su adicción al porno y al sexo

Los actores de método, aquellos que buscan experimentar al máximo las circunstancias y experiencias de sus personajes, con ánimo de lograr una simbiosis lo más perfecta posible, pueden llegar a perder el control en algún momento del proceso. En otras ocasiones, sin embargo, hacer un esfuerzo tan íntimo en la búsqueda de la identificación con otro, sea este otro real o producto de la ficción, también puede resultar terapéutico.

La actriz y cantante Andra Day, nominada en la pasada edición de los Premios Oscar por su interpretación de la legendaria Billie Holiday en el film de Hulu 'Los Estados Unidos vs. Billie Holiday' parece haber probado una de cal y otra de arena en cuanto a su construcción del personaje se refiere.

En una entrevista con InStyle, la artista se ha abierto sobre los retos a los que tuvo hacer frente a la hora de prepararse el papel, y qué partes de su propio recorrido le sirvieron para empatizar con Holiday. Refiriéndose a su deseo de ofrecer un retrato de la cantante que no la sexualizara, la actriz manifestó lo siguiente: "Había dejado atrás algo en mi propia vida: la lucha contra la adicción al porno y la adicción al sexo. Estoy siendo sincera porque sé que no soy la única. Pero sabía que quería que eso desapareciera".

A día de hoy, Day asegura haber vencido estas adicciones. Y su trabajo en la película le ha servido para cambiar sus ideas prestablecidas sobre la sexualidad y la belleza: "Ahora siento, después de haberme metido en la piel de Billie, que la estoy honrando, a ella y a la fuerza de la feminidad. Estoy en un lugar mejor ahora porque he superado la adicción".

El tema sexual no ha sido el único que ha tenido una influencia en Day a la hora de interpretar a 'Lady Jazz'. La actriz reconoce que acabó abusando del alcohol y del tabaco: "Empecé a fumar. Me enganché, y empecé a beber mucha, mucha ginebra". El proceso de dejar marchar el personaje, tal y como ha reconocido, ha sido largo y lento. Pero eso sí, Day no se arrepiente en absoluto de haber aceptado el desafío de dar vida en pantalla a la mítica artista.