Sandra Pica deja a Tom Brusse tras su cómplice reencuentro con Melyssa Pinto
El primer debate de la tercera edición del reality de Telecinco tuvo como protagonistas a la famosa expareja formada por el francés y la catalana.
La tercera edición de 'La isla de las tentaciones', el programa de telerrealidad estrella de Telecinco, ya se ha estrenado, y el público está ansioso por poder ir descubriendo, en las próximas semanas, los dramas de pareja, affaires con 'tentadores' y demás aventuras y desventuras del corazón a las que tendrán que enfrentarse los nuevos concursantes. Pero el interés por los devenires de algunos de los antiguos participantes no ha desaparecido ni mucho menos.
Así quedó claro ayer durante el primer debate de la nueva edición que contó con Melyssa Pinto y Tom Brusse como invitados de lujo. La expareja, recordamos, formó parte de la segunda temporada del reality, pero su relación se fue a pique cuando el francés cometió infidelidad con una de las solteras, Sandra Pica, joven con la que ha seguido desde entonces.
El encuentro de Melyssa y Tom, estuvo, como era de esperar, marcado por la tensión. Pero no el tipo de tensión desagradable que la mayoría esperaría en una situación como la suya: y es que, lejos de echarse los trastos a la cabeza, ambos se comportaron con cordialidad, e incluso tuvieron varios momentos de explícita complicidad. Con la entrada de Tom al plató, en el que Melyssa ya estaba presente, los dos no pudieron evitar las risas nerviosas y las miradas de soslayo. Una actitud explicada seguramente por los nervios que debían sentir al volver a verse tras muchos meses, pero que molestó profundamente a una tercera persona: Sandra.
La novia del francés entró poco después en el debate a través de videollamada por Skype. Y no se cortó a la hora de mostrar su enfado por lo que estaba viendo en directo. "Al final ves o esperas cosas u otras reacciones", manifestó con mucha seriedad, "yo cómo está él ahí no es lo que yo veo en casa. Estoy cansada de este tema porque para mí es pasado. Si para ellos no, que cada uno haga su vida. Ella, él y yo por separado porque estoy cansada".
La joven reveló que hacía solo unos días que se había mudado con Tom a un nuevo piso, y a continuación, soltó un bombazo que dejó a todo el mundo descolocado. "Se acabó", afirmó rotunda, añadiendo que estaba esperando a que el empresario "volviera a casa" para "largarse" ella.
Y aunque todavía no ha trascendido si Sandra cumplió después su amenaza, o si bien esta fue solo producto de la ira del momento, una cosa parece clara: entre Tom y Sandra todavía se interpone la catalana. "Me gustaría que te quitaras el trauma de Melyssa", le rogó el francés a su chica, que se defendió asegurando lo siguiente: "Me lo he quitado esta noche, ya está".