JAMES BOND

Pierce Brosnan salvó a Halle Berry de morir ahogada en 'Muere otro día'

Ambos protagonizaron la película de la saga de James Bond y solo una rápida actuación del actor con la maniobra de Heimlich salvó la vida de la actriz.

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Pierce Brosnan salvó a Halle Berry de morir ahogada en 'Muere otro día'

Pierce Brosnan fue el encargado de interpretar el personaje de James Bond en cuatro películas de la saga durante la década de los 90 y principios de los 2000. Seguía la estela de Sean Connery, George Lazenby, Roger Moore y Timothy Dalton, pero su sofisticación y su sarcasmo le convirtieron en uno de los preferidos del público. El actor irlandés se encargaba de salvar el mundo, pero en el rodaje de 'Muere otro día' también tuvo que salvar la vida de la chica Bond de esa película.

Tal y como ha desvelado en una entrevista con Jimmy Fallon, Halle Berry estuvo a punto de morir ahogada mientras rodaba una escena en la que tenía que comer de manera sensual y provocativa un higo. "Se supone que yo debía ponerme muy sexy, tratando de seducirle con un higo, pero acabé ahogándome y él tuvo que levantarse y hacerme la maniobra de Heimlich", explicó la actriz ganadora de un Premio Oscar.

Halle Berry durante una escena con Pierce Brosnan en 'Muere otro día'.
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Halle Berry durante una escena con Pierce Brosnan en 'Muere otro día'.

La rápida actuación de Brosnan evitó una tragedia y desde entonces le guarda un cariño muy especial: "¡James Bond sabe cómo hacer Heimlich! Él estuvo allí para mí, siempre será una de mis personas favoritas en el mundo", añadió antes de confesar que el momento "no fue nada sexy". Cabe recordar que esta maniobra consiste en presionar con fuerza entre ombligo y la caja torácica para desbloquear una posible obstrucción en la tráquea que impide respirar a la víctima.

La escena de Halle Berry saliendo del agua es una de sus apariciones icónicas y contribuyó a convertirla en sex-symbol de la época.
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La escena de Halle Berry saliendo del agua es una de sus apariciones icónicas y contribuyó a convertirla en sex-symbol de la época.

Sin embargo, no fue el único percance que sufrió Halle Berry en una de sus películas más accidentadas. Y es que durante las tomas que se grabaron en Cádiz sufrió una lesión en un ojo rodando una escena de acción en la que tenía que esconderse de un tiroteo. El humo que se generó fue directo a su ojo y le impidió ver correctamente, por lo que tuvo que acudir al hospital y permanecer en reposo por una inflamación en la córnea.