Los jugadores del PSG, espectadores de lujo en el partido parisino de la NBA
Neymar, Mbappé, Icardi, Varratti, Silva y Marquinhos disfrutaron en primera fila del encuentro que ganaron los Bucks y se codearon con las estrellas.
Ayer tuvo lugar en París el primer partido oficial de la NBA en tierras galas. Un evento muy esperado por marcar la primera vez que el tradicional partido europeo de la liga de baloncesto norteamericana se celebra en la capital francesa (durante la última década, ha sido Londres la ciudad anfitriona). Sobre la cancha se vieron las caras los Bucks de Milwaukee y los Hornets de Charlotte, saldándose el encuentro con el triunfo de los primeros y dejando una velada para el recuerdo de la que pudieron disfrutar a lo grande los miles de asistentes que se concentraron en las gradas del AccorHotels Arena.
Y entre ellos, y como invitados de lujo en el público, estuvieron también algunos de los futbolistas del Paris-Saint Germain, que no quisieron perderse la oportunidad de poder ver brillar en directo a jugadores como Giannis Antetokounmpo, o de presenciar el sentido homenaje al francés Tony Parker que se celebró antes de que comenzara el partido. Neymar, un consabido aficionado a la NBA, Mbappé, Icardi, Varratti, Silva y Marquinhos ocuparon la primera fila a pie de cancha y siguieron con gran atención (y diversión) el juego.
Fueron los propios futbolistas, además, los que dejaron testimonio en sus redes sociales de la gran cita, compartiendo en sus stories vídeos breves de lo que sucedía en el partido o bien colgando fotografías del propio grupo pasándoselo en grande desde el banquillo.
Además, antes del partido, los jugadores del PSG estuvieron visitando el vestuario de los Bucks e intercambiaron regalos (botas y camisetas) con algunas figuras estrella como el base George Hill o el mismo Antetokounmpo. Neymar Jr, Mbappé o Icardi postearon en su cuenta de Instagram una buena ristra de imágenes en las que aparecen posando fraternalmente con los baloncestistas, con los que compartieron risas y parece ser que también algún que otro baile.
Así que en definitiva, claro ha quedado que los astros del PSG pasaron una tarde de viernes insuperable. Tal y como lo calificó el propio Neymar en una de sus publicaciones, fue un "día maravilloso", en el que además de disfrutar del más alto nivel de baloncesto, los futbolistas del club francés volvieron a reafirmar la estupenda relación y el buen rollo que tienen entre sí.