Keylor Navas, bailes y mucha diversión en su macrofiesta familiar
El futbolista se lo pasó en grande durante la espectacular celebración del 18 cumpleaños de la hija de su esposa, Daniela.
Keylor Navas siempre ha dejado claro que lo más importante de su vida es su familia. El guardameta del Paris Saint Germain está casado con Andrea Salas desde hace ya más de una década y tienen dos niños en común, a los que se suma además la primogénita de su mujer, la adolescente Daniela, que es fruto de una relación anterior de la exmodelo, pero que se ha criado desde pequeña con el futbolista.
Y ayer el matrimonio tenía una ocasión muy importante que celebrar: el 18 cumpleaños de la mayor del clan, una fecha de lo más especial en honor de la cual los costarricenses quisieron organizar un verdadero fiestón. Los Navas Salas parecen estar ya de regreso en su tierra natal para las vacaciones de Navidad, y fue allí, en un impresionante local, en el que alojaron el aniversario de Daniela.
La joven esperaba el día con gran impaciencia, tal y como dejó ver en un story subido a su cuenta de Instagram en el que anunciaba que se estaba preparando para el gran día y en el que incluyó además un marcador con las horas que faltaban para que se diera el pistoletazo de salida a la gran fiesta. Y parece que esta estuvo a la altura: tanto la propia cumpleañera como el portero y su mujer subieron a sus redes sociales mucho material gráfico de la velada, en la que primaron las sonrisas, los bailes y las muestras de cariño y amor.
El propio Keylor, que ya ha demostrado sus habilidades como bailarín en más de una ocasión, fue uno de los más animados de la noche, tal y como dejó ver en varios clips compartidos en su perfil. En ellos aparece moviendo el esqueleto y tarareando las canciones sobre el escenario en el que tocaba una banda en directo. Junto a la propia Daniela, que en las imágenes sale mostrándose muy cariñosa con él, parece que el guardameta se convirtió en uno de los protagonistas de la fiesta.
Y menuda fiesta. Desde zancudos a malabaristas y acróbatas, pasando por una suntuosa decoración cargada de globos y luces, una tarta de varios pisos y una colorida pista de bailes, lo cierto es que los esfuerzos del portero y su esposa por organizar un evento inolvidable para su hija mayor tuvieron su resultado en la explícita diversión de la que hicieron gala tanto los invitados como ellos mismos.