Ella Balinska, la estrella de 'Los Ángeles de Charlie' que trabajaba vendiendo zapatos
La joven actriz, una de las protagonistas del reboot de la mítica película, se ganaba la vida hasta hace meses en unos grandes almacenes.
La vida da muchas vueltas y no hay destino escrito de antemano. Son muchos los famosos que desempeñaban trabajos normales y corrientes antes de que les surgiera la oportunidad de alcanzar el estrellato. Muchos de ellos han hablado, posteriormente a estar bien colocados, sobre esas épocas de su vida, a las que acreditan por haberles aportado una visión de la realidad alejada de lo elitista.
Este parece ser el caso de una de las protagonistas de la nueva película de 'Los Ángeles de Charlie', actualización de la popular serie televisiva de los 90 y de la icónica cinta del 2000 protagonizada por Cameron Díaz, Lucy Liu y Drew Barrymore. La nueva entrega cinematográfica, estrenada el 5 de noviembre en los Estados Unidos, narra el retorno a la acción del cañero trío de guerreras, que cuenta ahora con los rostros de la veterana Kristen Stewart, de Naomi Scott y de la hasta ahora desconocida Ella Balinska.
Y pese a que la película no está precisamente brillando en la taquilla, la expectación que ha generado en todo el mundo es alta, y ha provocado en consecuencia que se proyecte un amplio foco mediático sobre su trío de estrellas. Una de ellas, toda una recién llegada a Hollywood: y es que Ella Balinska ha visto su vida dar un vuelco capital en los últimos meses, pues antes de ser fichada para la película estaba empleada como dependienta en Selfridges, unos grandes almacenes londinenses.
Así lo reveló la intérprete en una entrevista con Evening Standard Magazine: "Durante la gran parte de los últimos tres años he trabajado en el departamento de calzado masculino". La joven se ganaba la vida de esta forma mientras trataba de impulsar su carrera de actriz, y antes de recibir la llamada que lo cambiaría todo. "Me marché en mayo", aseguró Balinska, que hasta hace solo unos meses no podía soñar con la posición en la que se iba a encontrar en la actualidad.
Además, la actriz habló con mucho aprecio del tiempo que pasó vendiendo zapatos, explicando que "me permitían tomarme dos horas de descanso a la hora de la comida cuando tenía un casting. Los amigos que hice allí repasaban las líneas de guion conmigo en el almacén". Y por otro lado, el empleo le sirvió para algo importante: "Por mucho que parezca raro, Selfridges es un sitio muy guay para mantenerse con los pies en la tierra", reflexionó la artista.
Una estrella 'normal'
Porque la joven promesa tiene muy claro que no piensa dejar que la fama se le suba a la cabeza: "Lo más importante para mí es mantenerme fiel a mí misma. Siempre quiero ser genuina", declaró en la citada entrevista. Para ello, la británica cuenta con un buen modelo a seguir: "Rihanna todavía coge el metro. Puedes ser una estrella gigantesca pero vivir una vida totalmente normal. Así que eso es a lo que yo aspiro. La fama es solo aquello que tú permites que sea".