Jo Wood relata la historia de excesos de los Rolling Stones
La exmujer de Ron Wood ha contado en el Daily Mail como conoció a Ron Wood y ha hablado también sobre algunas de las adicciones de Mick Jagger y compañía.
En abril de 1962 se fundó la banda de rock ‘The Rolling Stones” y con ello, también se empezaría a escribir la historia de uno de los grupos más importantes en la historia del género que después de 57 años, su música sigue sonando y será siempre eterna, habiendo cosechado un prestigio solo alcanzable por otras leyendas situadas a su mismo nivel.
Durante toda la carrera de los ‘Rolling’, siempre se les ha relacionado junto a dos palabras que definen todos estos años que llevan sobre los escenarios, una de ellas es ‘Éxito’ y la otra ‘Excesos’. En 2008, Ron Wood, guitarrista de la banda, habló en "Memorias de un Rolling Stone" sobre su vida y de todas sus adicciones, así como los del resto de miembros de la banda. En el libro donde relata sus experiencias, llegó a decir que tanto él como sus compañeros se sentían "prisioneros en una cárcel de oro".
Ahora, a través de un libro de fotografías publicado por la que fue mujer del propio Ron, Jo Wood, recuerdan de nuevo los tiempos más azarosos de la banda. La propia Jo ha hablado para el Daily Mail, donde ha contado entre otras cosas como conoció a Ron y sobre algunos de los excesos de Mick Jagger y compañía.
La historia de Jo y Ronnie
Jo Wood conoció al que fue su marido en una fiesta en 1977, tras esto, se estuvieron viendo durante un tiempo hasta que Ronnie le invitó a quedar en París, invitación que ella aceptaría viajando hasta el país galo, donde se presentó en el hotel donde se alojaba el grupo. Para sorpresa de Jo, no había nadie en el hotel por lo que tuvo que dormir como pudo en una habitación destinada para el servicio.
Durante el transcurso de esa misma noche, el bajista se presentó en la habitación junto a Keith Richards, con el que se sentó en el suelo para drogarse: “se sentó en el suelo, comenzó a hurgar en una bolsa, sacó una cuchara de plata, un bote con pastillas y un encendedor. En unos segundos se estaba pinchando la droga a través de la chaqueta que llevaba puesta. Esperó un poco mientras las drogas hacían efecto y después me miró y dijo: ‘Un placer conocerte, querida. He oído hablar mucho de ti”.
Después de esto, Jo y Ron siguieron viéndose y ella le acompañaba a él y al resto de la banda por París. Más tarde la británica se quedó embarazada del guitarrista y se mudaron a Los Ángeles donde se instaló junto a ellos Keith Richards en la sala de invitados.
Jo cuenta que Keith Richards dejó durante un tiempo la heroína y que se volvió más alegre y feliz, y además, quería conocer a una chica. La mujer Ron por aquel entonces, le dijo que tenía una amiga en Nueva York que le podía presentar: “Le hablé de una amiga mía que estaba trabajando como modelo en Nueva York y le faltó tiempo para contratar un helicóptero y llevarme con él hasta la ciudad para que les presentara. Salieron juntos durante un par de años”.
Vacaciones accidentadas
Después de explicar como se conocieron ella y el bajista, Jo, ha querido seguir relatando algunas de las escabrosas anécdotas que vivió junto a su marido, como cuando decidieron hacer un viaje al Caribe, pero acabaron detenidos: “Una noche conocimos a dos tipos en un casino, hablamos con ellos y dos días después aparecieron en la casa en la que estábamos alojados. Traían cocaína particularmente buena. Pasamos toda la noche despiertos hasta que a las seis de la mañana nos pidieron prestado el coche alquilado que usábamos en la isla. Nos devolvieron el coche más tarde y se fueron. Poco después el jardín estaba lleno de policías y nosotros acabamos en una celda. Los tipos eran grandes traficantes y habían utilizado nuestro coche para trasladar una enorme bolsa con coca. No sé cómo la historia no acabó en los periódicos. Solo sé que me hizo pensar y que durante al menos unos días me repetí que nunca volvería a hacer algo así”.
De gira con los Rolling
Otro de los temas que ha abordado Jo en su entrevista con el Daily Mail ha sido sobre como eran las giras junto a la banda: “Ir de gira era divertido. Todo parecía ser una gran fiesta, una aventura. Cuando viajábamos por carretera íbamos en limusina y nos asegurábamos de que estuviera llena de alcohol. En el avión privado que siempre usábamos, había una habitación en la parte de atrás donde todos acabábamos en la cama, bebiendo y fumando mientras volábamos”.
Asimismo Jo cuenta al medio británico que tras la discusión en 1982 entre Mick Jagger y Keith Richards las cosas cambiaron bastante en el grupo: “Cada uno tenía su propio vehículo para ir y venir de los conciertos cuando antes todos nos metíamos en el coche de Keith. No siento nostalgia , pero era una vida muy diferente".