Raquel Morillas, de concursante de Gran Hermano a vendedora de la ONCE
La exconcursante ha podido optar a un puesto por su discapacidad. Ha tenido que pasar un periodo de formación y dos exámenes. Venderá cupones en la calle.
Raquel Morillas, una de las concursantes más conocidas de la historia de Gran Hermano, ha comunicado a sus seguidores a través de su cuenta de Youtube y de Instagram que a partir de ahora tendrá trabajo como vendedora de la ONCE.
La exconcursante y colaboradora en algunos programas de televisión ha podido optar a ese trabajo ya que tiene un grado de discapacidad por el accidente de tráfico que sufrió en 2003 junto a la que era su pareja en ese momento Noemí Ungría. Las secuelas que le quedaron de por vida hace que pueda optar a un puesto de trabajo como vendedora de cupones.
Formación en la ONCE
Raquel Morillas ha seguido todos los pasos. Primero ha tenido que dar una formación de una semana para conocer todos los tipos de cupones y juegos que ONCE tiene en el mercado. También ha tenido que superar dos exámenes. El primero de 23 preguntas acertó 21 así que ha superado la prueba con éxito y el segundo fue sobre el funcionamiento de la TPV (la máquina de generar cupones). “He sido una adicta al juego ahora ya no lo soy, así que todo lo que sea del juego soy la number one”, ha contado Raquel a todos sus seguidores a los que va haciendo una narración muy exhaustiva de todos los pasos que está llevando hasta obtener el puesto.
Raquel venderá cupones en la calle y cree que será eficiente en su nuevo puesto de trabajo: “Deseando que me veáis con el chaleco fluorescente y que me quiten los cupones de las manos. Me dará vergüenza ir por la calle, pero eso se tiene que pasar. Estoy feliz y ya era hora que las cosas malas pasaran y llegaran las buenas”.
De Gran Hermano 3
Raquel Morillas participó en Gran Hermano 3. Fue la tercera expulsada de la casa. Pese a eso la popularidad de Raquel subió como la espuma. Protagonizó una boda muy mediática con Noemí Ungría. Ambas sufrieron un accidente de tráfico que a punto estuvo de costarle la vida. Polémico y sonado también fue su divorcio. En los últimos tiempos Raquel ha confesado que ha perdido todo el dinero y que era ludópata desde los 18 años, algo que dice tener superado.