Se desestima el caso penal por agresión sexual contra el actor Kevin Spacey
La Fiscalía ha retirado los cargos contra el artista, que estaba acusado de asaltar a un joven durante un episodio sucedido en un bar hace tres años.
Kevin Spacey fue uno de los rostros más visibles del vendaval de escándalos sexuales que azotó Hollywood en octubre del 2017 con la caída del poderoso productor Harvey Weinstein, y que marcó un punto de inflexión en la industria del cine con el nacimiento del movimiento #meToo. El actor fue uno de los más salpicados por la ola de acusaciones, precipitándose el fin de su carrera con razón de las denuncias por abuso y agresión sexual que hicieron contra él varios hombres.
Hoy, sin embargo, se ha podido saber que el único proceso penal abierto contra el intérprete, en una Corte de la isla de Nantucket, Massachusetts, ha sido desestimado. Spacey estaba acusado de agresión indecente y sexual a raíz de un episodio sucedido en un bar en el año 2016 y durante el que, supuestamente, emborrachó y manipuló los genitales de un joven que trabajaba en el establecimiento y que por entonces tenía 18 años.
Sin embargo, la razón por la que la Fiscalía ha decidido retirar los cargos se debe precisamente a la "falta de disponibilidad del denunciante". Y es que durante la audiencia celebrada el pasado 8 de julio, el joven se negó a responder a las preguntas del abogado defensor amparándose en su derecho a guardar silencio recogido en la Quinta Enmienda de la Constitución estadounidense.
Esta decisión de no declarar habría sido consecuencia del miedo a incriminarse a sí mismo cuando se le preguntó por el teléfono móvil en el que presuntamente estaban registrados los mensajes que mandó a su novia durante la noche en la que estuvo con el actor en el bar, y durante la que el joven clama que se dieron los hechos ya comentados. Dicho teléfono desapareció a pesar de que la policía asegura haberlo entregado a la familia del chico, pero sí se tienen las capturas de la conversación, que comienza a mitad y en la que el denunciante asegura que Spacey le tocó el pene "ocho veces".
Pero el abogado del actor, Alan Jackson, acusó al joven de eliminar a propósito algunos de estos mensajes, concretamente aquellos en los que se podía interpretar que la relación física entre ambos había sido consentida. Por su parte, el denunciante negó haber manipulado el teléfono a pesar de que su propia madre confesó haber borrado algunas imágenes "vergonzosas" del dispositivo.
Y durante la audiencia del 8 de julio, tras ser interrogado exhaustivamente al respecto y advertirle que de haber eliminado pruebas, podía caerle una demanda, el joven se negó a seguir contestando. Esto conllevó a que prácticamente se diera por supuesto que el caso iba a ser desestimado por el juez. Y finalmente hoy ha sido la propia Fiscalía la que ha retirado todos los cargos.