Detienen a una famosa pareja de estafadores que se hacía pasar por George Clooney
El tándem de delincuentes llevaba huido de la justicia desde 2014, cuando fueron condenados por suplantar la identidad de la estrella de Hollywood.
La rentabilidad comercial de la que pueden hacer gala ciertos famosos, capaces de generar un dineral en cuestión de publicidad o de multiplicar las ventas de cualquier producto, les convierte a menudo en víctimas del uso indebido o no autorizado de su propio nombre o imagen por parte de individuos con pocos escrúpulos dispuestos a enriquecerse a su costa. Son muchas las celebrities que han tenido que afrontar situaciones de este tipo, pero la historia relativa a George Clooney es de otra categoría por el perfil de los estafadores y su larga línea de tiempo.
Este fin de semana han sido detenidos finalmente en Tailandia Franceso Galdelli y Vanja Goffi, los conocidos como los 'Bonnie y Clyde' italianos, que habían usurpado la identidad del actor norteamericano para lucrarse ilegalmente después de haber engañado hace casi una década a distintos inversores apoyándose en la reputación del actor.
El hombre detenido ha confirmado durante el interrogatorio posterior a su captura que se hizo pasar por George Clooney para lanzar una firma de ropa online con la que buscaba estafar a sus clientes, tal y como se ha emitido en un comunicado de la División de Supresión del Crimen tailandesa. El resultado de sus estafas les habría hecho embolsarse una cantidad superior al millón de euros.
La pareja llevaba siendo prófuga de la justicia desde 2013, año en el que ambos abandonaron juntos su país natal después de haber sido sentenciados por fraude por un tribunal milanés. El propio Clooney declaró en el juicio contra ellos y otro tercer cómplice involucrado en los delitos, testificando no tener absolutamente nada que ver con los muchos documentos de la empresa fraudulenta en los que aparecía su supuesta firma.
Tras el veredicto del tribunal y la huida de Italia, Galdelli y Goffi se refugiaron en Tailandia, donde llevaban instalados clandestinamente desde el 2014. La pareja vivía en una mansión de la ciudad costera de Pattaya, y que, según ha asegurado la policía, estaba vigilada por un dron. Su arresto se ha logrado gracias a una operación coordinada entre las fuerzas de seguridad tailandesas y la Interpol, que llevaba buscándoles desde hace más de un lustro.
La suplantación de identidad de Clooney no es, sin embargo, el único delito perpetrado por la pareja, que también tenía cargos en Italia por la venta falsificada de relojes Rolex desde Internet. Al parecer, la pareja llegaba incluso a enviar paquetes de sal a los clientes que engañaban en vez del producto encargado, que era inexistente. Pero desde este sábado, la carrera como estafadores profesionales de la pareja ha llegado a su fin.