Antonio Tejado confiesa por qué se lió con María Jesús mientras aumenta la tensión
El concursante destaca que lo hizo egoistamente pero no se arrepiente, mientras que la modelo ya ha cerrado toda puerta a la reconciliación.
Antonio Tejado y María Jesús Ruiz han sido la gran pareja durante la presente edición de Gran Hermano Dúo. Juntos han protagonizado algunos de los momentos más sonados y, a modo de película en plena semana de Premios Oscar, han comprimido su historia en un corto espacio de tiempo dada la fugacidad con la que se vive el reality de Telecinco.
Como el resto de concursantes, tuvieron que enfrentarse este domingo a los tuits que envían los seguidores del programa, ansiosos por conseguir alguna declaración sobre dos de los mayores protagonistas que habitan la casa de Guadalix de la Sierra. "Tengo claro que entré sola, estoy sola y me iré sola", confesó la modelo antes de fulminar cualquier mínima esperanza de reconciliación. "La ruptura es definitiva", aseguró.
Así, deja claro que fue ella la que tomó la decisión de terminar con una relación que estaba dando mucho que hablar: "Si yo hubiese querido seguir, estaríamos juntos. Es lo que yo creo". Además, dio un golpe sobre la mesa destacando el profundo arrepentimiento que sentía por haber estado con Tejado: "No debí acercarme a Antonio porque, aunque lo pasé bien, tuve momentos de decir 'estoy incómoda, no sé cómo frenarlo'", explicó.
En la otra cara de la moneda encontramos al sobrino de María del Monte, que no lamentó lo que había tenido con la modelo: "No me arrepiento de nada porque son momentos vividos", explicó. "Yo, lo de María Jesús, lo he hecho egoístamente, mirando por mí", aseguró instantes después, aunque "creo que no me ha venido bien para el concurso".
"Como no sé estar solo, cojo una mano. Y a veces me equivoco y las otras personas pueden demostrar que he cogido esa mano. Soy de los de un clavo saca otro clavo", explicó de manera poco elegante Tejado sobre los motivos que le habían llevado a liarse con María Jesús. Ella, mientras, se reía para paliar la incredulidad de lo que estaba escuchando por parte de una persona con la que parecía tener unos sentimientos de los que no queda el menor rastro.