Jennifer Lawrence anuncia su boda
La popular actriz pasará por primera vez por el altar de mano del galerista Cooke Maroney.
Jennifer Lawrence (28) se puede considerar con sobradas razones una de las intérpretes más famosas y queridas de la Meca del Cine actual. La estadoundidense, ganadora de un Óscar y nominada en otras tres ocasiones, se ha convertido en una de las favoritas del público no solo debido a su talento interpretativo si no también a su espontaneidad y sentido del humor.
Una pareja discreta
El portal Page Six ha sido el encargado de lanzar la explosiva noticia del compromiso de la actriz con el que supone su pareja desde el pasado junio, el galerista de arte Cooke Maroney. Se trata de un joven de 34 años que trabaja como Director de la Gladstone Gallery en Nueva York, encargada de representar artistas de calado. Lawrence y Cooke se conocieron gracias a una amiga íntima de ella, y desde entonces se les ha podido ver juntos en un puñado de ocasiones, a pesar de no haber posado nunca de forma oficial y de manejar sus citas y escapadas de forma muy reservada siempre.
Las alarmas de boda sonaron cuando la pareja fue atisbada el lunes por la noche en una romántica cena en el exclusivo restaurante neoyorquino Raoul´s. Allí la actriz hizo gala de un precioso anillo de compromiso, que fue el que desató los rumores hasta que el propio representante de Lawrence confirmó la alegre novedad a la prensa.
El historial romántico de la actriz
El último romance conocido de J-Law fue con Darren Aronofsky (49), su director en la estrambótica cinta "Mother!". El vínculo entre ambos, que comenzaron a salir a raíz del rodaje de la película, no llegó al año, aunque se despidieron en buenos términos. Lawrence también se vio brevemente con Chris Martin (41), el vocalista de Coldplay, pero su novio más estable fue seguramente Nicholas Hoult (29), otra relación nacida al calor del trabajo en la gran pantalla ya que las dos jovenes estrellas encarnaron los personajes de Mystique y Bestia en la franquicia de "X-Men".
No se conocen detalles sobre cuándo y dónde será la boda, pero no cabe duda de que supondrá una celebración por todo lo alto, y un evento enormemente ilusionante para la intérprete. Y es que Lawrence ya confesó a Vogue hace unos años que "no podía esperar a estar casada".