DOODLE

Oskar Schlemmer, el revolucionario de la forma en la Bauhaus

Google rinde homenaje al artista criado en la escuela germana de arte en el 130 aniversario de su nacimiento.

Google homenajea a Oskar Schlemmer en el 130 aniversario de su nacimiento.

Oskar Schlemmer fue una de las figura que dio nombre y leyenda a la Bauhaus, la escuela alemana de arte que apenas estuvo oprativa una década y que revolucionó el arte en todas sus facetas. El propio Schlemmer fue un revolucionario que cambió y combinó algunas percepciones y al que Google ha querido rendir homenaje en uno de sus doodles.

El buscador ha querido inaugurar el cambio de su logotipo tras el final de las vacaciones con el artista alemán en el 130 aniversario de su nacimiento. Schlemmer fue un visionario y artista total que desarrolló su creatividad tanto en la pintura como la escultura, el diseño o el baile, donde encontraría un modo de expresión que le permitió combinar su concepción del arte.

Fue precisamente como coreógrafo como encontraría su obra más reconocida: Triadisches Ballet, una creación en la que los actores mostraban sus cuerpos transformados en figuras geométricas en lo que el mismo Schlemmer terminaría por definir como "una fiesta de la forma y el color".

Schlemmer estuvo perjudicado por una época convulsa políticamente dentro de la Alemania de entreguerras. Pasó a formar parte del equipo de profesores de la Bauhaus con la llegada de la década de los veinte, donde enseñó pintura mural y escultura antes de pasarse al teatro. Con la llegada de Hannes Meyer a la escuela y su concepción comunista del arte, Schlemmer abandonaría para siempre la escuela de arte.

Como pintor, Schlemmer se interesó en el cubismo como forma de expresión de la silueta humana, centrando sus cuadros en las posibilidades de las figuras -generalmente femeninas- dentro de un espacio. Su pintura evolucionó precisamente hacia la problemática de la figura humana dentro del espacio en el que estaba rodeado. Además de su arte, Schlemmer consiguió dejar para la posteridad sus diarios, unos documentos con los que se pudo conocer en profundidad cómo era el ambiente dentro de la Bauhaus.