Katy Perry pensó en el suicidio tras el fracaso de su último disco

Katy Perry ha desvelado todos los detalles de cómo asumió la mala acogida de su último disco. En una entrevista para Vogue Australia, la cantante ha confesado que entró en una gran depresión que le hizo pensar incluso en el suicidio.

Tras una carrera de éxito y un gran amor y entrega a su música, el fracaso de su álbum 'Witness' la dejó más que tocada: "Tuve ataques de depresión y mi corazón se rompió el año pasado porque, sin saberlo, puse mucha confianza en la reacción del público y este no respondió como yo esperaba", se sinceró.

El disco debutó con el primer puesto en la famosa lista Billboard, pero los distintos singles que lo acompañaban no obtuvieron la mejor respuesta por parte del público. La cantante aludió a que era una prueba del universo: "Creo que el universo me está diciendo 'vale, tú siempre hablas en tus canciones sobre quererse a uno mismo y ser auténtico, pero te vamos a hacer pasar una prueba y a dejar sin apoyo. Así comprobarás cuanto te quieres a ti misma de verdad".

La propia intérprete reconoció que había estado en enero en el Instituto Hoffman, un lugar donde tratan a los pacientes para dejar las conductas negativas atrás. "Creo que todos somos computadoras y en ocasiones adoptamos estos virus que empiezan a desarrollarse en nuestro comportamiento y en nuestras relaciones", reconocía afirmando que ese retiro fue como una nueva vida.

Katy vive ahora un momento dulce, y es que tras confesar el mal trago que ha pasado con la depresión, sus fans y las redes sociales se han volcado con ella, demostrando su apoyo y haciendo que la cantante coja más fuerzas que nunca.

También tendrá el apoyo de Orlando Bloom, con quien está dispuesta a luchar para que el amor que tuvieron durante un año de relación triunfe y funcione para mucho tiempo. Por el momento, viajará a Australia para actuar en su gira mundial Witness: The Tour.