Mario Balotelli: la difícil infancia del futbolista más polémico
Entregado en acogida con solo dos años, no quiere saber nada de sus padres biológicos de los que dice que solo le buscan por dinero
Mario Balotelli es, sin duda, uno de los jugadores más carismáticos del panorama futbolístico internacional pero lo que pocos saben es que detrás de sus locuras y extravagancias hay una infancia difícil.
Nacido en Palermo, Sicilia, el 12 de agosto de 1990, de padres inmigrantes, los ghaneses Rose y Thomas Barwuah, es el pequeño de cuatro hermanos: Abigail (24), Enoc (19) y Ángel (13).
Con solo dos años y tras sufrir una dura enfermedad intestinal que arrastraba desde que nació, su familia, que vivía en una casa en Brescia con otros 20 inmigrantes y unas pésimas condiciones de salubridad, lo entregó a los servicios sociales ya que el pequeño precisaba una medicación y cuidados que no podían proporcionarle.
Adoptado por una familia italiana
El Tribunal de Brescia encomendó su custodia al matrimonio formado por Francesco y Silvia Balotelli con los que Mario Balotelli se crió.
Tras desplazase la familia a Concesio, un pueblo a 4 kilómetros de Brescia, comenzó a desarrollar su pasión por el fútbol. Apodado desde niño como ‘Super Mario’, a los 15 años (2005) debutaba como profesional en el Padova, de la tercera división italiana, y dos años después debutaba con el Inter de Milán.
Mala relación con sus padres biológicos
Balotelli mantuvo el contacto con sus padres biológicos a lo largo de los años, pero la relación se fue debilitando con el paso del tiempo. Según la versión de Thomas Barwuah, esto habría sucedido por culpa de la familia adoptiva que habría indispuesto a su hijo contra ellos.
Mario asegura que sus padres biológicos siempre se habían desentendido de él y solo le reclamaron cuando comenzó a despuntar en el fútbol.
El jugador nunca volvió a tener una buena relación con sus padres. A los 18 años cambió su apellido y tomó la nacionalidad italiana. No se hizo antes ya que su situación legal era de acogimiento renovable a plazos.
Su madre biológica trabaja como limpiadora
Los escándalos dentro y fuera del terreno de juego colmaron la paciencia del Inter y en 2010 fue vendido al Manchester City.
Meses después de su llegada al Reino Unido saltaba la noticia a la prensa británica: su madre biológica, Rose Barwuah trabaja como limpiadora de oficinas a 8 euros la hora y se alojaba en una modesta vivienda subvencionada cerca de la mansión donde residía Balotelli.
Aunque muchos vieron en este acercamiento geográfico un intento de aprovechar la fortuna de su hijo, otros aseguraban que sólo quería estar cerca de él. “Nos vemos, pero él tiene su vida y yo la mía”, declaraba ella entonces a la prensa británica.
Su dura infancia, sumada a los problemas de racismo sufridos durante su carrera en Italia han marcado, sin duda, el carácter del actual jugador del OGC Niza, equipo con el que más goles ha marcado en su carrera.