Juego de Tronos 7x06: Más allá del muro
Alerta spoilers: Resumen del sexto capítulo de la séptima temporada de la serie de HBO
Nieve, nieve, alguna intriga de palacio y mucha más nieve. Así podría definirse el sexto capítulo de la séptima temporada de Juego de Tronos, un episodio controvertido por la autofiltración de HBO que, más allá de eso, deja alguna imagen triste, mucha tensión y el enfrentamiento que todos los espectadores llevaban esperando desde que comenzó esta penúltima temporada que está a punto de terminar.
La madrugada del domingo 27 al lunes 28 se cerrará la tanda de capítulos de la producción de HBO y no la volveremos a ver hasta 2019. Para evitar enfados, los creadores y guionistas de Juego de Tronos han apostado esta vez por imprimir velocidad a la serie, algo que ha vuelto a dejarse ver en este episodio emitido en Movistar + y HBO España.
El capítulo 7X05 nos dejaba con Jon Snow y su equipo improvisado de héroes dispuesto a adentrarse en el abismo blanco que hay en la parte norte del muro. Su misión no era otra que cazar a uno de los caminantes, llevarlo hasta Desembarco del Rey, convencer a Cersei Lannister del peligro de esos zombies y emprender juntos una lucha en la que Snow y Daenerys Targaryen aprovecharían para tumbar a la actual reina y sentar a la madre de los dragones en el trono de espadas. Parecía fácil en la voz de Tyrion Lannister. El capítulo emitido la pasada madrugada demostró que estaba lejos de serlo.
En busca del caminante
Jon Snow, Tormund, Jorah Mormont, Gendry, El Perro, Tormund, Beric Dondarrion, Thoros de Myr y sus acompañantes desconocidos se adentran en el peligro en busca de alguno de los seguidores del Rey de la Noche en un episodio centrado especialmente en la misión más kamikaze que se recuerda en la serie de HBO. Como el episodio es largo -71 minutos-, los guionistas centran los primeros momentos del episodio en las diferentes conversaciones de los personajes: el amor de Tormund a Brienne de Tarth, las impertinencias de El Perro, el misticismo cargante de Beric...lo recurrente antes de enfrentarse a miles de muertos armados.
Antes de encontrar el paradero del Rey de la Noche, los exploradores se ven sorprendidos por un oso blanco muerto del que terminan por librarse aunque deja malherido a Thoros -acabará muriendo congelado-. Tras el enfrentamiento, Snow y sus acompañantes verán a una pequeña comitiva de caminantes a la que derrocaran quedándose con uno de ellos como prueba para llevárselo a Cersei. Pero el guerrero muerto demuestra tener unos pulmones de hierro, avisa con un grito infernal al resto de caminantes, que aparecen tan rápido como Snow y los suyos llegaron al muro desde Rocadragón.
Ante un futuro negro, Jon ve en su última oportunidad de vida a Daenerys, así que envía a Gendry al muro de vuelta para que envíe un cuervo que avisa a la madre de los dragones. Mientras, los exploradores acaban en mitad de un lago congelado rodeado por la horda muerta.
Tensión en Invernalia
No todo iba a ser acción en Más allá del muro. Juego de Tronos centra parte del capítulo en esa relación extraña que ahora mantienen Arya y Sansa. Las hermanas se miran con sospechas y la más joven decide reunirse con la dama de Invernalia para hablarle del papel que ha encontrado en la habitación de Meñique y en el cual Sansa queda retratada como traidora -mensaje que Sansa envió a Robb Stark obligado por los Lannister-. Las tensiones siguen creciendo entre ambas y los planes de Meñique -una vez más- siguen funcionando.
Dragones contra zombies
¿Para qué está la Mano de la Reina? pues para no hacerle caso. Al menos en lo que se refiere a Daenerys. La madre de los dragones desoye las recomendaciones de Tyrion tras leer el mensaje de auxilio que logró hacerle llegar alguno de los cuervos enviados desde el norte y llega a toda velocidad al lugar en el que se encuentra Jon Snow. Acostumbrado a los rescates inesperados, el Rey del Norte y los suyos contemplan como Daenerys que, a lomos de Drogon, achicharra a unos cuantos caminantes y logra situarse al lado de los exploradores para rescatarles.
Haciendo gala de su parsimonia -y a veces desesperante comportamiento-, Snow decide que es el momento de matar unos cuantos caminantes más. Tal vez para demostrar su maña ante Daenerys. Mal plan. El Rey de la Noche saca una lanza azulada y consigue clavársela a Viserion, uno de los tres dragones. El animal cae de forma fulminante y muere. Snow sigue a lo suyo y, como era de esperar y como si de un partido de rugby se tratase, un par de caminantes le placan y lo hunden en las profundidades.
Daenerys, sus dos dragones y el resto de supervivientes se van de allí rápidamente, dejando a Jon Snow en las gélidas aguas del pantano. Para variar, logra salvarse y sale de forma inexplicable del agua sin darse cuenta de que allí aún están los caminantes -su paso es tranquilo cuando no toca batallar-. No importa, para eso está su tío Benjen, que aparece con una honda en llamas para despedirse del mundo salvando a su falso sobrino.
¿Dany?
Cuando Daenerys se encuentra entristecida por la despedida de uno de sus hijos aparece en los bajos del muro el caballo de Benjen, que sostiene a duras penas al bueno de Jon. Los supervivientes del muro le llevan de vuelta y con cuidados logran que el Rey del Norte se mantenga con vida.
Al despertar, pide perdón a Daenerys por haber perdido a Viserion -al que el Rey de la Noche toca y convierte a su bando-. La madre de los dragones le dice que así ha logrado convencerse de la amenaza. Jon llama a Daenerys 'Dany' algo que le horroriza y que lleva a la segunda escena de tensión sexual no resuelta entre ambos tras la visita a las cuevas de Rocadragón. El romance promete pero quizá eso sea para la octava temporada ¿o no?.